Bloomberg — Ghislaine Maxwell fue declarada culpable en el caso que la acusaba de atraer y preparar a niñas menores de edad para que fueran objeto de abusos sexuales por parte de Jeffrey Epstein, un veredicto que ofrece algo de justicia largamente esperada para sus víctimas.
El jurado leyó el veredicto en un tribunal federal de Manhattan tras deliberar durante unos cinco días. Epstein, su antiguo novio y empleador, era un delincuente sexual convicto que murió bajo custodia federal antes de poder ser juzgado.
El caso de alto perfil se remonta a décadas atrás y se cruza con algunos de los nombres más importantes de Wall Street y de la alta sociedad. Maxwell, antigua dama de la alta sociedad e hija de un barón editorial caído en desgracia, se enfrenta a la posibilidad de pasar años en prisión.
Los fiscales dijeron que Maxwell, de 60 años, fue parte integral de los crímenes de Epstein. Sus abogados argumentaron que fue utilizada como “chivo expiatorio” de sus fechorías.
Cuatro mujeres subieron al estrado contra Maxwell, diciendo que fueron abusadas cuando eran adolescentes. Los fiscales también presentaron a varios ex empleados de Epstein como testigos para describir su relación con Maxwell. Un antiguo piloto privado de Epstein dijo que veía a Maxwell como la “número 2″ de su jefe.
Los abogados de Maxwell afirman que el gobierno está tratando de convertirla en el chivo expiatorio de los crímenes de Epstein, quien murió en 2019 mientras esperaba su propio juicio por tráfico sexual. Su equipo de defensa también ha atacado implacablemente la fiabilidad del testimonio de sus acusadores.
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