Bloomberg — La fábrica de Tesla Inc. en Fremont, California, se parece más a una burda casa de fraternidad que una instalación propiedad de una empresa de vanguardia en el corazón de una región progresista, han denunciado seis mujeres, actuales y antiguas empleadas, en el más reciente aluvión de demandas que afectan a Tesla por presunto acoso sexual.
“Aunque Tesla afirma públicamente que fomenta un entorno seguro y respetuoso para sus trabajadores”, la verdad es que durante años Tesla ha sometido a las mujeres que trabajan en sus instalaciones de la fábrica de Fremont a unas condiciones de pesadilla de acoso sexual rampante”, según el párrafo inicial de cada una de las demandas presentadas el martes en el Tribunal Superior del Condado de Alameda.
Tesla no respondió a una solicitud de comentarios.
Las denuncias detallan el acoso por parte de colegas y supervisores masculinos, así como la falta de respuesta de Tesla cuando las reclamaciones fueron denunciadas internamente. Cinco de las seis mujeres que demandaron trabajaban en Fremont; una estaba en el sur de California.
Alrededor de 10.000 personas trabajan en la planta de Fremont, donde Tesla fabrica los modelos eléctricos S, X, 3 e Y. La fábrica lleva mucho tiempo siendo objeto de denuncias por acoso racial y sexual. Muchas quejas nunca llegan a los tribunales porque los empleados a tiempo completo de Tesla firman acuerdos que exigen que las disputas en el lugar de trabajo se traten en un arbitraje a puerta cerrada, lo que en sí mismo ha suscitado las críticas de los inversionistas de Tesla.
En mayo, un exempleado negro ganó una poco frecuente indemnización de US$1 millón por discriminación en un arbitraje luego de que la compañía no evitara que sus supervisores le llamaran “palabra con N”. Más recientemente, un jurado federal de San Francisco sopesó acusaciones similares de un antiguo trabajador contratado que era ascensorista en la planta de Fremont y le concedió US$137 millones, lo que se cree que es uno de los mayores veredictos de la historia en un caso de discriminación racial por un solo demandante. Tesla está desafiando el veredicto cy calificándolo como “sin precedentes”, y dijo en una presentación judicial que “no tiene relación con las pruebas reales en el juicio.”
“Tesla no se ha tomado en serio el trabajo de abordar el acoso sexual, desde la cúpula de la empresa hacia abajo”, dijo en un comunicado David Lowe, socio del bufete de abogados de San Francisco Rudy Exelrod Zieff & Lowe. Lowe también representa a Jessica Barraza, que presentó una demanda el mes pasado por el acoso “rampante” en las instalaciones de Fremont.
El Washington Post ya informó de las seis denuncias.
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Este artículo fue traducido por Estefanía Salinas Concha.
