Bloomberg — La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, dijo que Estados Unidos debe luchar contra el lavado de dinero y la evasión fiscal en su país si quiere promover los esfuerzos anticorrupción en todo el mundo.
“Estados Unidos no puede ser una voz creíble para un gobierno libre y justo en el extranjero si, al mismo tiempo, permitimos que los ricos infrinjan nuestras leyes con impunidad”, dijo Yellen en el texto de los comentarios que tiene previsto pronunciar el jueves. “Si queremos que las instituciones libres prosperen en todo el mundo, primero debemos modelar cómo se ven en casa”.
Yellen hablará en la Casa Blanca durante la llamada Cumbre para la Democracia, un evento de dos días con asistentes de más de 100 gobiernos, junto con activistas, líderes del sector privado y periodistas.
El jefa del Tesoro dijo que el dominio del sistema financiero estadounidense en los mercados internacionales y las leyes laxas significan que “hay un buen argumento de que, en este momento, el mejor lugar para esconder y blanquear ganancias mal habidas es en realidad EE.UU.”
Por eso, dijo, el Tesoro anunció esta semana nuevas reglas que exigen a las empresas estadounidenses de propiedad nacional y extranjera que proporcionen nueva información sobre las personas que realmente las poseen y controlan.
El departamento también dijo esta semana que solicitaría comentarios públicos sobre las reglas propuestas que requieren que los compradores de bienes raíces estadounidenses que se pagan en efectivo revelen su identidad.
“A veces, lo único que albergan estas propiedades de lujo son ganancias mal habidas: son lavaderos de dinero en el piso 81″, dijo Yellen.
Los esfuerzos contra la corrupción también incluyen el nuevo impulso de la administración para hacer cumplir las leyes fiscales existentes en EE.UU., dijo Yellen.
“No son solo los actores extranjeros los que abusan de nuestro sistema financiero”, dijo. “Hay corrupción aquí en casa. Especialmente cuando se trata de cómo la gente paga impuestos, o mejor dicho, cómo no lo hacen“.
El Tesoro ha calculado que la evasión de impuestos, principalmente por parte de los hogares y las empresas de altos ingresos, costó al gobierno US$600.000 millones en ingresos perdidos el año pasado. El gobierno de Biden ha solicitado al Congreso fondos adicionales para ayudar a reforzar la aplicación de la ley en la denominada legislación Build Back Better, que está pendiente de aprobación por los legisladores.
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Este artículo fue traducido por Estefanía Salinas Concha.