Banco Bradesco SA, el segundo banco más grande de Brasil por valor de mercado, se asoció con la fintech BCP Global, con sede en Miami, para ofrecer inversiones digitales a brasileños ricos y de clase media alta.
En virtud del acuerdo, los clientes de Bradesco tendrán acceso a carteras globales diseñadas y administradas en asociación con BlackRock Inc., según Leandro Miranda, director ejecutivo de Bradesco. Las personas que tengan un mínimo de US$10.000 podrán abrir una cuenta de inversión en Estados Unidos en unos 15 minutos, dijo Miranda en una entrevista.
“Bradesco tiene alrededor de 2 millones de clientes adinerados con más de 100.000 reales (US$18.000) invertidos con nosotros, por lo que vemos un gran potencial para el nuevo servicio”, dijo Ricardo Lanfranchi, director ejecutivo y presidente de Bradesco Global Advisors, la rama de asesoría de inversión registrada del banco en EE.UU. “Nuestros beneficios fiscales únicos también traerán más clientes al banco en busca del producto”.
El apetito por los activos en dólares de pequeños inversionistas en Brasil es cada vez mayor. Las acciones brasileñas se han desplomado un 17% este año en términos de dólares, ya que la volatilidad derivada de las elecciones presidenciales del próximo año, así como la preocupación por la política fiscal, lleva a muchos brasileños de intentar diversificar el riesgo, incluso a través de inversiones internacionales.
Bradesco, que tiene 545.000 millones de reales en activos administrados, cerró un acuerdo de US$500 millones en 2019 para comprar BAC Florida Bank, con sede en Coral Gables, Florida, que atiende a clientes de altos ingresos en su mayoría de América Latina.
Otras empresas están tomando medidas similares para aprovechar la tendencia. Avenue Securities, con sede en Miami, que ofrece servicios de corretaje a brasileños que quieren invertir en activos estadounidenses, recibió en agosto una segunda ronda de inversiones de US$30 millones liderada por el Latin America Fund de SoftBank Group Corp.
BCP Global, que ofrece soluciones digitales para instituciones financieras en América Latina, utiliza una estrategia que reinvierte los dividendos y otras distribuciones para ayudar a evitar la posible necesidad de pagos de impuestos diarios para los residentes no estadounidenses. Las carteras se construyen utilizando ETF de UCITS, que son fondos cotizados registrados en Europa.
“Estamos empezando con el asesoramiento de carteras digitales para ayudar a los clientes brasileños a cruzar la barrera de la inversión extranjera, y luego les ofreceremos servicios de intermediación digital en EE.UU.”, dijo Miranda en la entrevista.
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