Bloomberg — La incesante competencia entre los mineros de bitcoin para ensamblar las computadoras más rápidas ha llevado a una nueva táctica sorprendente: instalar computadoras dentro de tanques de líquido refrigerante.
El equipo sumergido funciona más rápido sin sobrecalentarse. En un negocio donde cada nanosegundo de ventaja cuenta, todos los grandes mineros están probando esta tecnología ahora mismo, según Nishant Sharma, fundador de la consultora minera BlocksBridge.
“Parece una pecera con máquinas en su interior”, dijo Sharma en una entrevista. “Tarde o temprano, todos los grandes mineros realizarán minería de inmersión a gran escala”.
La tendencia ilustra hasta dónde están dispuestas a llegar las empresas de minería de criptomonedas para obtener una ventaja sobre sus competidores. Su fortuna sube y baja dependiendo de si logran ser los primeros en resolver complejos cálculos que sustentan el sistema de bitcoin, impulsando una carrera por las máquinas más rápidas.
El mes pasado, Riot Blockchain Inc, una empresa minera que cotiza en Nasdaq, dijo que estaba desarrollando la primera mina de bitcoin a gran escala refrigerada por inmersión en sus instalaciones de Texas. La empresa dijo que colocará 46.000 máquinas de minería que requieren 200 megavatios de electricidad en líquido refrigerante. Royal Dutch Shell Plc también presentó en agosto un nuevo líquido de refrigeración por inmersión que puede utilizarse en la minería de criptomonedas.
Las operaciones de minería de bitcoin están formadas por miles de computadoras apiladas en estanterías en almacenes rodeados de enormes ventiladores. La electricidad puede suponer alrededor del 80% del costo operativo de un minero, según Tyler Page, CEO de Cipher Mining Technologies Inc.
La industria de las criptomonedas ha sido criticada por la cantidad de electricidad que consumen sus operaciones de minería. Si bien la inmersión no hará que los equipos utilicen menos energía, es probable que sean más rentables si pueden funcionar más rápido.
El impulso a la minería refrigerada por inmersión ha provocado un aumento de la demanda del refrigerante sintético que baña las plataformas mineras.
“Estamos al límite de nuestra capacidad para enfriar los dispositivos electrónicos con aire”, dijo David Sundin, cofundador y científico jefe de la compañía de Texas Engineered Fluids, en una entrevista el martes. “Nuestro negocio ha aumentado un 500% en los últimos seis o siete meses. Simplemente se ha disparado “.
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