Ciudad de México — La inflación le está ganando la carrera a los ingresos de los trabajadores en México, lo que causó que en el tercer trimestre de 2021 más personas no pudieron comprar la canasta alimentaria con el ingreso de su trabajo, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En el reporte trimestral del Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP), publicado este martes 23 de noviembre, el porcentaje de la población con ingreso laboral inferior al valor monetario de la canasta alimentaria aumentó de forma trimestral al pasar de 39,9% en el segundo trimestre de 2021 a 40,7% en el tercer trimestre de 2021.
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El aumento trimestral de 0,8% en el ingreso laboral real y de 0,3% de la masa salarial fue insuficiente para reducir trimestralmente la pobreza laboral, ya que los precios de la canasta alimentaria subieron en sintonía con la inflación.
En cuanto al cambio anual en el porcentaje de la población con ingreso laboral inferior al costo de la canasta alimentaria (pobreza laboral), entre el tercer trimestre 2020 y el tercer trimestre de 2021 se observa una disminución a nivel nacional de 5,3 puntos porcentuales al pasar de 46% a 40,7%, respectivamente.
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Lo anterior puede deberse a la recuperación de la economía y el mercado laboral mexicano en comparación con el tercer trimestre 2020, periodo afectado por el cierre de actividades debido a la Covid-19, dijo el Coneval.
El Coneval señala que entre los factores que explican el aumento trimestral de la pobreza laboral se encuentra el aumento de las Líneas de Pobreza Extrema por Ingreso, que equivale al valor de la canasta alimentaria por persona al mes.
En el tercer trimestre 2021 la inflación general anual promedio fue de 5,8%, es decir, 0,2 puntos porcentuales inferior a la del segundo trimestre 2021 (6,0%) y 1,9 puntos porcentuales mayor a la presentada un año antes, en el tercer trimestre 2020 (3,9%).
Las Líneas de Pobreza Extrema por Ingresos rural y urbana aumentaron 3.1% y 2.9%, respectivamente. Ambos aumentos son superiores a la inflación promedio del tercer trimestre 2021 (1,3%).
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El jitomate fue el producto que tuvo mayor incidencia en los dos ámbitos, rural y urbano. Por otra parte, la cebolla y la tortilla de maíz (de todo tipo y color), ocuparon el segundo y tercer lugar en la canasta alimentaria en el ámbito rural; y los alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar y la cebolla en la canasta alimentaria urbana.
Destaca el aumento trimestral del precio del jitomate (22,1%) y de la cebolla (42,5%) que incidieron en ambas canastas alimentarias. De tal forma que, durante el tercer trimestre el incremento en el ingreso laboral (0,8%) no fue suficiente ante el incremento en los precios de las canastas alimentarias.
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El especialista senior de la División de Mercados Laborales y Seguridad Social del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), David Kaplan, calificó como preocupante que la pobreza laboral no siguió bajando en el tercer trimestre de 2021.
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