La eurodiputada Isabel Santos, quien encabeza la misión de observadores de la Unión Europea (UE) para el proceso electoral en Venezuela el próximo 21 de noviembre, regresó a Caracas esta semana para el despliegue de las delegaciones que se encargarán de monitorear los comicios en todo el territorio.
Desde el área de parking en el Hotel Eurobuilding, en la urbanización Chuao de Caracas, los representantes de la UE esperaban la autorización para subirse a los vehículos y trasladarse hacia los estados. En esta oportunidad, no hubo escandalosos bidones de gasolina sobre las camionetas, pero sí la promesa de que llegarán a ser más de 130 observadores el domingo, para cubrir más de 1.000 mesas.
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Santos, con mascarilla blanca y chaleco azul marino con la identificación del organismo europeo, se acercó a los medios de comunicación para intentar abordar las preguntas, que a pocos días de las megaelecciones, han surgido con la presencia de la MOE y la tensión que ha generado en algunos sectores radicales.
“Nuestro informe será entregado a todas las autoridades del país (...) el informe será como en cualquier otro país, no hay ninguna injerencia, solo información y recomendaciones”, fue lo destacado por Isabel Santos, el rostro más visible de esta delegación, ante las acusaciones que personalidades de la administración de Nicolás Maduro han hecho en contra de la labor que desarrollan.
Sobre esos comentarios, hechos principalmente por Diosdado Cabello, jefe de campaña del Gran Polo Patriótico, aseguró que se tratan de “opiniones” que se dan con todo derecho, como parte de la “democracia y las diferentes formas de abordar los problemas”.
La diputada en el Parlamento Europeo por el Partido Socialista insistió en lo completo que será el contenido del documento a presentar el 23 de noviembre, luego de las elecciones, que contemplará detalladamente todos los hechos y manifestaciones durante la campaña, el ejercicio de la prensa, los posibles reclamos y los mecanismos que se utilicen para atenderlos.
Desde hace 15 años, Venezuela no contaba con una misión de este nivel y el principal objetivo de Santos y sus acompañantes ha sido generar confianza en los venezolanos para lograr su participación. En varias oportunidades, la jefa de la misión ha hecho referencia a este punto, que por ahora sostuvo será demostrado una vez que se desarrolle el proceso.
Aunque se negó a revelar los principales desafíos y retos que se han encontrado, que serán luego presentados en el informe final, Isabel Santos sí manifestó la impresión que le ha causado la fuerza y la participación de actores civiles y políticos con los que se han reunido.
Prefirió igualmente no comparar a Venezuela con ningún otro de los países que ha visitado e insistió en que hasta el momento no ha encontrado dificultades para llevar a cabo sus actividades.
