Bloomberg — A los usuarios de Robinhood les gustaría mucho tener la oportunidad de gastar su dinero en una broma basada en otra broma.
Los inversores individuales están pidiendo a Robinhood Markets Inc. que cotice la moneda meme del momento, Shiba Inu, una criptodivisa que toma su nombre de la mascota canina de Dogecoin, a su vez una parodia de bitcoin.
Según casi todas las métricas financieras convencionales que se utilizan para valorar un activo, SHIB -como se la conoce- prácticamente no tiene ningún valor. Pero en el ecosistema de las criptomonedas, no sólo tiene valor, sino que ese valor se ha disparado un 100% en la última semana, dándole una capitalización de mercado total -al menos teóricamente- de más de US$28.000 millones.
Una petición en Change.org pidiendo a Robinhood que incluya Shiba Inu, una criptomoneda inspirada en Dogecoin, cuenta ya con más de 326.000 firmas.
Mientras Robinhood informaba el martes de que sus ingresos por transacciones de criptomonedas se habían desplomado un 78% en el tercer trimestre con respecto a los tres meses anteriores, #SHIBARMY era tendencia en Twitter y las redes sociales bullían con comerciantes minoristas que exigían poder operar con la moneda en su aplicación.
Pero la empresa dijo que no estaba preparada. A pesar de la demanda y de la fuerte competencia de otras plataformas de corretaje que ya han incluido Shiba Inu, la empresa se retractó y dijo que el entorno normativo en torno a las nuevas monedas aún está evolucionando.
“Vamos a ser muy cuidadosos”, dijo el CEO de Robinhood, Vlad Tenev, en una conferencia telefónica después de que la compañía informara de los ingresos del tercer trimestre que no alcanzaron las estimaciones de Wall Street. “Lo escuchamos alto y claro, nuestros clientes quieren nuevas monedas”.
La compañía dijo que seguiría siendo cautelosa a la hora de añadir nuevas monedas, especialmente si se arriesgan a suscitar la preocupación de los reguladores como valores no registrados. Las criptocarteras, que pronto estarán disponibles en su plataforma, permitirán a los usuarios acceder entonces a otras monedas que Robinhood no ofrece, según Tenev.
La lista de espera para ese producto ha superado el millón de clientes, según dijo la empresa anteriormente. Según su última presentación, el 64% de los ingresos de criptomonedas proceden de Dogecoin.
Su inquietud podría estar justificada. “Podría haber inconvenientes financieros o de reputación”, dijo Mike Bailey, director de investigación de FBB Capital Partners. “Si hay un gasto real y el comercio decepciona, entonces es un problema. Por otra parte, si HOOD puede cotizar la moneda a bajo precio, pero los inversores pierden dinero o se frustran con la nueva moneda, entonces HOOD podría ver dañada su reputación el sentimiento.”
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Coinbase Global Inc. añadió el token el mes pasado.
El comercio de Shiba Inu ha sido volátil en su ascenso. La criptomoneda se desplomó a principios de esta semana después de que Elon Musk tuiteara que no poseía la moneda. En un tweet posterior, dijo que había comprado Bitcoin, Ether y Dogecoin, y “eso es todo”.
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