Bloomberg — El fabricante holandés de bicicletas eléctricas VanMoof empezará a vender un modelo de alta velocidad, llamado V, a finales del próximo año, según anunció la empresa el martes. La V tendrá una velocidad máxima de 31 mph (50 km/h) en los Estados Unidos y un precio de unos US$3.600, según el anuncio. “Vemos un gran grupo de clientes que está muy interesado en ir más rápido y llegar mucho más lejos en una e-bike que antes”, dijo el cofundador y director ejecutivo de VanMoof, Ties Carlier, que comenzó la compañía en 2009 con su hermano mayor, Taco. En septiembre, VanMoof anunció que había recaudado US$128 millones, lo que la convertía en una de las empresas de bicicletas eléctricas con mayor financiación del mundo.
Las bicicletas de alta gama de VanMoof han demostrado ser populares entre los viajeros en las ciudades. En la opinión de Carlier, bicicletas eléctricas más rápidas son el siguiente paso obvio en la evolución del transporte urbano. Sin embargo, el auge del ciclismo en las ciudades estadounidenses y europeas, impulsado por la pandemia y los imperativos del cambio climático, ha hecho que se preste una atención renovada a la forma en que los autos, los peatones y una gama cada vez más amplia de pequeños vehículos eléctricos de dos ruedas pueden compartir las carreteras de forma segura. VanMoof ha decidido no esperar a que estos argumentos se desarrollen y presenta la V para intentar empujarlos hacia una conclusión rápida, flexible y sin autos. La empresa está anunciando la bicicleta, y empezando a aceptar reservas, un año antes de la producción para poder educar a los ciclistas y a las ciudades y tratar de persuadirlos para que adopten velocidades más altas.
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Carlier habló el lunes con Hyperdrive sobre la decisión de presentar el nuevo modelo, la seguridad vial en el nuevo mundo de la micromovilidad y cómo VanMoof ha sorteado las interrupciones en la cadena de suministro mundial. La entrevista ha sido editada para mayor claridad y extensión.
¿Por qué presentar una bicicleta de alta velocidad?
Es una categoría que aún no se ha creado realmente. Todavía tiene que cambiar la normativa, sobre todo en Europa. Las grandes ciudades están construyendo nuevos carriles para bicicletas, pero sólo son carriles para bicicletas, por lo que no son muy adecuados para velocidades más altas. Todavía hay grandes carriles para coches y un carril para bicicletas relativamente pequeño. Y tienes todas estas formas diferentes de micromovilidad, eléctrica la mayoría de las veces, que es realmente impresionante. Los gobiernos no deberían verlo como un problema, sino como una gran oportunidad. Por el momento, es un obstáculo muy grande. En toda Europa existe la norma de las bicicletas electrónicas, lo que se llama una pedelec (bicicleta eléctrica de pedales) que puede ir hasta 45 kilómetros por hora (28mph). Pero en el centro de la ciudad no pueden utilizar los carriles de bicicletas, tienen que ir por el carril normal de los autos y seguir exactamente las mismas normas que una moto grande o un auto: pierdes la ventaja de ir en bicicleta. Los gobiernos tienen que cambiar las normas.
¿Cómo te gustaría que fueran las normas?
En Bélgica hicieron una prueba en la que suavizaron las normas para las pedelecs: se les permite ir por el carril de biciletas, pero los conductores tienen que atenerse a los límites de velocidad, igual que en un coche. Las ventas de pedelecs se dispararon. Fue una muy buena señal del efecto que tiene la normativa en la adopción de este tipo de bicicletas eléctricas más rápidas. Estamos lanzando esto un año antes de comenzar la producción. Eso es un poco raro en la industria de la bicicleta, especialmente para una marca establecida como nosotros. Queremos que la gente nos acompañe en este viaje. No se trata sólo de diseñar y crear esta bicicleta. Es muy importante que estas bicicletas sean una alternativa real a los autos. La bicicleta va a servir para hacer viajes de hasta 30 o 40 kilómetros y seguirá siendo más rápida que cualquier otra cosa y será mucho más divertida.
Ya hay mucha preocupación por la seguridad de las bicicletas electrónicas. El New York Times acaba de publicar un artículo sobre el caos peatonal en París. ¿Ha pensado en la posible atención negativa a la que está invitando al hacer esto?
Todo gran cambio va a causar mucha agitación. La gente a menudo no ve el panorama general. Lo mismo ocurre con la adopción del auto eléctrico. Tienes a todos estos detractores diciendo esto o aquello sobre la huella de carbono de su fabricación. Sí, sí, pero mira el panorama general. Tenemos que pasar por esto para llegar a un lugar mejor. Y esto es lo mismo. Como empresa, tenemos a mucha gente en contra. Vimos nuestra publicidad prohibida en Francia por ser antiautos. Pero ahora vemos que es un punto de inflexión en esta discusión. Sí, es peligroso ir en bicicleta, porque hay muchos autos en la carretera. Los accidentes se producen cuando se choca con el auto. También se puede decir que es muy peligroso caminar por la carretera, así que hay que prohibir a la gente que vaya andando. O puede ser que el problema real sea que hay demasiados autos y que van demasiado rápido. He leído el artículo del New York Times esta mañana y me he reído todo el rato. Es tan normal y tan bueno que exista esta discusión.
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Al observar el mercado estadounidense, ¿qué ve? Hay un rápido crecimiento, pero la adopción aún no está a la altura de la mayor parte de Europa.
Una de las mejores cosas que vemos ahora es que las grandes empresas tecnológicas están empezando a ofrecer bicicletas a sus empleados. Si trabajas en Amazon, puedes conseguir un abono gratuito para una VanMoof. Y estamos trabajando con casi todas las grandes empresas tecnológicas conocidas de Silicon Valley en acuerdos similares. Los empresarios están empezando a animar a sus empleados, dándoles beneficios y acceso gratuito a las bicicletas. Eso también animará a los gobiernos locales a construir mejores infraestructuras. Es la mejor señal que hemos visto en Estados Unidos de que se trata del comienzo de una verdadera revolución.
El sector de las bicicletas, junto con casi todos los demás, ha experimentado una gran alteración en la cadena de suministro en los últimos dos años. ¿Cómo ha afectado eso a su negocio?
Casi todas las empresas que tienen muchos problemas en sus cadenas de suministro compran componentes estándar. Nosotros tenemos un enfoque diferente. Tenemos 100 personas en nuestro departamento de Investigación y desarrollo. Diseñamos todos los componentes nosotros mismos. Casi todos nuestros proveedores proceden del sector de la electrónica de consumo o de la industria del automóvil. Esto fue una gran ventaja en la pandemia, porque no dependíamos de un solo proveedor de componentes, como el resto de la industria de la bicicleta. Controlamos toda nuestra cadena de suministro. Así que el año pasado nuestros ingresos se triplicaron y este año casi volveremos a triplicarlos.
Actualmente cuentan con 200.000 ciclistas en todo el mundo. ¿Tienen un objetivo de cuánto pueden crecer?
Creemos que podemos llegar a los 10 millones en cinco años. Es una cifra muy grande, pero es posible y debería ser sobre todo gente nueva en el mercado. El mercado de las bicicletas es lo suficientemente grande como para vender un millón de unidades al año, pero no es eso lo que buscamos, sino crear una nueva categoría.
Recientemente han terminado una ronda de recaudación de fondos. ¿Cuál es la vía de financiación para llegar a los 10 millones de ciclistas?
Probablemente tengamos que hacer algo más de recaudación de fondos. Todavía no lo sabemos. Es otra ronda de recaudación de fondos o es una oferta pública inicial. Pero no es muy pronto. Esto no es algo en lo que estemos centrados. Estamos realmente centrados en el lanzamiento de productos.
