Bloomberg Línea — La carga de la deuda llegó a una cifra récord en 2020 tras las decisiones tomadas para enfrentar la crisis que generó la pandemia, según un informe del Banco Mundial. El documento, previo a la reunión anual del organismo internacional, alertó que la deuda de los países de bajos ingresos totalizó US$860.000 millones, un incremento de 12% en comparación con los niveles de 2020.
Para el presidente de la organización, con sede en Washington, David Malpass, el riesgo es que los países salgan de la crisis que originó el Covid-19 con una deuda que tardarán años en gestionar. Sumando los países de ingresos medios y bajos, la deuda externa se incrementó 5,6% en 2020 y llegó a representar US$8,7 billones.
Según el informe, el aumento que tuvo el endeudamiento externo fue superior al crecimiento que registraron el ingreso nacional bruto (INB) y las exportaciones. La proporción entre la deuda externa y el INB subió a 42% el año pasado, desde 37% previo, mientras que la relación entre la deuda y las exportaciones llegó a 154%, desde el 126% anterior. Los cálculos no incluyen a China.
En el caso de América Latina y el Caribe, la proporción entre la deuda externa y el INB llegó a 49% desde 22,4% en 2011 y 40,8% en 2020. En relación a las exportaciones, llegó a 186,4% en 2020, después de registrar 124,9% en 20219.
Aunque tradicionalmente estas proporciones se miran con relación al Producto Interno Bruto (PIB), el Banco Mundial asegura que es partidario de utilizar el INB, que aunque es una medición parecida al PIB también contabiliza los ingresos primarios netos recibidos del extranjero.
La tendencia que se observó en la región se debió, en parte, a que el ritmo con el que se acumuló la deuda externa fue superior al crecimiento económico de la mayoría de los países de renta baja y media, dice el documento. Además, estas economías se vieron afectados por la caída que tuvieron las exportaciones debido a la pandemia.
“Los responsables de la formulación de políticas deben prepararse para un posible sobreendeudamiento cuando las condiciones del mercado financiero se vuelvan menos favorables, especialmente en las economías de mercados emergentes y en desarrollo”, dijo Carmen Reinhart, primera vicepresidenta y primera economista del Banco Mundial.
Los latinos más endeudados
Si se mira como proporción del INB, los países latinoamericanos más endeudados son Panamá (220%), Nicaragua (98%) y El Salvador (79%). El top cinco lo cierran Argentina (68%) y Ecuador (59%). El informe resalta que el Producto Interno Bruto de los países de ingresos bajos y medios cayó 2,5%, estando los países de América Latina y el Caribe entre los más afectados. Todo esto en un contexto en el que el PIB mundial se redujo 4,3% el año pasado, la mayor contracción desde la Gran Depresión.
En el caso de Panamá, el informe resalta que los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) fueron negativos en 2020, luego de que se dieran salidas por US$890 millones, a pesar de las medidas del gobierno por contrarrestar el impacto de la pandemia, como la puesta en marcha de proyectos de infraestructura y un nuevo régimen de incentivos a la inversión.
Los países que tienen la menor carga de deuda, en proporción al INB, fueron Guatemala (33%), Perú (38%) y Brasil (39%). No obstante, si se analiza el monto total, esta última economía es la líder con US$549.234 millones.
“Necesitamos un enfoque integral del problema de la deuda, en el que se contemplen la reducción del endeudamiento, una reestructuración más rápida y una mayor transparencia”, agregó Malpass.
La semana pasada, el Banco Mundial calculó que el PIB regional crecerá 6,3%, superior a 5,2% que pronosticó en junio. Sin embargo, la organización considera que la mayoría de los países no lograrán revertir aún el golpe de la pandemia, que ocasionó una caída económica de 6,7% en 2020.
Entre las estrategias que sugirió para contrarrestar esta tendencia estuvo que los gobiernos replanteen las prioridades del gasto público, incluyendo una mejor focalización de los subsidios, o elevando los impuestos sobre alimentos no saludables y las emisiones de carbono.