Bloomberg — Estados Unidos ha tenido durante al menos un año tropas en Taiwán entrenando a fuerzas locales para que se defiendan en caso de un ataque de China, según un funcionario de defensa estadounidense, un hecho que probablemente antagonizará aún más los lazos entre Washington y Pekín.
El funcionario, que pidió no ser identificado, confirmó un informe anterior del Wall Street Journal de que más de dos docenas de miembros del servicio estadounidense, incluidas las fuerzas especiales, han estado en Taiwán durante más de un año. Parte del entrenamiento se ha realizado con las fuerzas marítimas locales, según el diario.
Los eventos se producen al tiempo que China aumenta la presión sobre la isla que considera parte de su territorio, enviando decenas de aviones de combate a la zona de identificación de defensa aérea de Taiwán. Al mismo tiempo, EE.UU. y varios aliados, incluidos Japón y el Reino Unido, han estado realizando simulacros navales en aguas cercanas.
“EE.UU. tiene un interés permanente en la paz, la seguridad y la estabilidad del Indo-Pacífico, incluido el Estrecho de Taiwán”, dijo el jueves el portavoz del Pentágono, John Supple, en un comunicado . “EE.UU. continuará apoyando una resolución pacífica de los problemas a través del Estrecho, de acuerdo con los deseos y los mejores intereses de las personas de ambos lados”.
Funcionarios estadounidenses han instado en repetidas ocasiones a Pekín a que reduzca sus actividades y reduzca las tensiones.
“Las acciones que hemos visto por parte de China son provocativas y potencialmente desestabilizadoras”, dijo el secretario de Estado, Antony Blinken, el miércoles en una entrevista en París con Bloomberg Television. “Lo que espero es que cesen estas acciones porque siempre existe la posibilidad de un error de cálculo, de falta de comunicación, y eso es peligroso”.
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Durante décadas, EE.UU. y Taiwán han tenido una estrecha relación militar, principalmente definida por la venta de miles de millones de dólares en armamento de alta tecnología, incluidos drones armados y aviones F-16. Y aunque la presencia de un pequeño número de fuerzas estadounidenses en la isla tiene precedentes, no ha sido publicitada en el pasado.
“Actividades como esta, con fines de capacitación, se han realizado durante años”, dijo Bonnie Glaser, directora del Programa Asia en el German Marshall Fund de EE.UU. “En el pasado, estas actividades se han mantenido en secreto. Si ahora se hacen públicos deliberadamente, eso es nuevo e indudablemente provocará una reacción de China”.
