Lima — “Es momento de poner al Perú por encima de posiciones partidarias aisladas”. Con esta frase el presidente Pedro Castillo, dio paso a un breve pero directo mensaje a la nación este último miércoles, en el que reveló la renuncia de Guido Bellido a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM); un personaje cuestionado desde su nombramiento que llegó a ocupar por 69 días el cargo más alto entre los ministros de Estado.
Este jueves se oficializa el nombramiento de Mirtha Vásquez, expresidenta del Congreso, como titular de la PCM, y con ella llegan otros seis nuevos ministros a las carteras ministeriales de Educación, Trabajo, Interior, Producción, Energía y Minas, y Cultura. Pasaron de ser dos mujeres en el Gabinete Ministerial a cinco en total, con Vásquez a la cabeza; y aunque la paridad todavía no se asoma, la decisión en sí misma muestra un avance en una dirección positiva.
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“Esperemos que bajo el liderazgo de Vásquez los mismos mensajes del gabinete vayan hacia dar oportunidades a las mujeres, a promover la equidad de género y hacia el respeto”, apunta a Bloomberg Línea Elena Conterno, presidenta de IPAE - Asociación Empresarial, quien además saluda la designación de la también abogada y exparlamentaria del Congreso.
“La sola salida de Bellido ya es una excelente noticia. Si bien Mirtha Vásquez es de izquierda, es demócrata. Respeta la independencia de poderes, y la libertad de prensa y de expresión”, indica Conterno.
Pero todavía hay mucho pan por rebanar. Expertos consultados por este medio detallan los retos principales que enfrentará el nuevo gabinete ministerial de Pedro Castillo en el corto plazo, y nos recuerdan por qué aún no podemos hablar de tensiones que se disipan.
LOS CAMBIOS: IMPORTANTES, PERO ¿ACERTADOS?
Arturo Maldonado, profesor de Ciencia Política en la Pontificia Universidad Católica del Perú y Socio de 50+1, identifica ahora a un gabinete ministerial fortalecido, pero considera que esto podría haber significado, a su vez, que el Perú tenga una presidencia más debilitada.
Indicios de esta hipótesis se percibieron ayer miércoles luego de que se filtraran, previo a la juramentación de los ministros, los cambios que se darían al interior del Ejecutivo, empezando por el nombramiento de Vásquez como titular de PCM.
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En declaraciones a la prensa, el vocero de la bancada de Perú Libre (que llevó a la presidencia a Castillo), Waldemar Cerrón, aseguró de forma tajante que el partido no aceptaba al nuevo Gabinete Ministerial, y hasta acusó al al gobierno de “traición”.
“La bancada de Perú Libre no respalda este Gabinete, porque consideramos que es una traición a todas las mayorías que han esperado durante muchos años llegar al poder para que sean atendidos y no se tiene acá una consecuencia mínima".
Waldemar Cerrón, vocero de la bancada de Perú Libre
Sin embargo, poco duraron las palabras de Cerrón como un frente unido en representación de Perú Libre (PL). Luego de la juramentación del Gabinete Ministerial de Castillo, diversos parlamentarios de dicha bancada, más cercanos a Castillo que al ala de Vladimir Cerrón -líder de PL-, expresaron de forma pública su respaldo hacia las decisiones que tomó el presidente.
Al mismo tiempo algunos saludaron la designación de Betssy Chávez como ministra de Trabajo, quien pertenece a la bancada de PL pero ha sido cuestionada por congresistas de esta agrupación política, quienes la perciben menos confrontacional para su gusto.
Pero el mensaje de Waldemar Cerrón fue claro desde una facción de su bancada, a pesar de que el flamante ministro de Interior, Luis Barranzuela, es actualmente el abogado de Vladimir Cerrón, Guido Bellido (quien se reincorporará al Congreso tras su paso por PCM) y del partido PL.
“Castillo en Perú Libre, para bien o para mal, tenía un punto de apoyo de gobernabilidad. Tenía una bancada, sobre todo en el Congreso, que lo protegía de cualquier intento de vacancia. Ahora no sabemos cómo se colocaría Perú Libre o qué pasará. El señor Waldemar Cerrón ha dicho que Castillo debe verse en el espejo de (Martín) Vizcarra, sugiriendo no solo que se quedó sin bancada, sino que finalmente a él lo vacaron”, advierte Maldonado.
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La politóloga María Paula Távara, también docente de UTEC, anota que la reacción del ‘ala Cerronista’ de PL, venga de Waldemar o Vladimir, era esperable. Távara recuerda que Waldemar Cerrón indicó durante la campaña electoral que si el presidente se alejaba del pueblo o lo traicionaba, sería el partido de PL quien tuviera que enmendar la situación.
“Desde la campaña electoral (Waldemar Cerrón) dejó clara sus postura si es que Castillo tenía alguna forma de moderación, aunque no sabemos si sus políticas van a ser moderadas. Pero con Vásquez en PCM, al menos el tono cambia hacia uno más conciliador”, percibe la politóloga.
Aunque la bancada de PL tiene a ‘cerronistas’ con una posición muy marcada en sus filas, Conterno remarca que no se puede dejar de lado la presencia de los más cercanos a Castillo. “Habrá que ver cómo queda ese grupo y qué pasa en el Congreso con el voto de confianza”, menciona.
“EN EL PERÚ, TODO PUEDE PASAR”
Aunque lo más criticado ha sido el nombramiento de Barranzuela en Interior por lo que a todas luces sería un conflicto de interés, dada su posición de abogado defensor de Cerrón, Távara anota que era esperable que con el gabinete, como gesto de buena fe, algo tuviera que darse hacia Perú Libre; aunque reconoce que esto podría generar tensiones nuevas.
“Si se tiene en cuenta que hay un ministro del Fenate (el flamante titular de Educación, Carlos Gallardo Gómez, es miembro de la Federación Nacional de Trabajadores en la Educación -Fenate-Perú-, gremio del que Castillo era dirigente) y que el congresista y almirante José Cueto ya empezó a atacar a Gisella Ortiz (ministra de Cultura), probablemente se vayan a abrir varios flancos. Menos de los que se abrieron con el gabinete anterior, porque hay menos figuras cuestionables, pero se van a abrir de todas maneras, porque no es que el Congreso tenga la mejor disposición de aceptar a Castillo como presidente todavía”, prevé la especialista.
Maldonado precisa, en tanto, que si bien se espera más orden en los ministerios de Estado -la salida del cuestionado extitular de Trabajo, Iber Maraví, ha sido ampliamente saludada-, al mismo tiempo se percibe un panorama de más desorden en las relaciones entre el Legislativo y Ejecutivo.
“En el pasado, hay que decirlo, Vásquez ha tenido una actitud firme con respecto a potenciales intentos de vacancia -en otras circunstancias-. Puede tener la muñeca necesaria para lidiar con las tensiones que surjan desde el Legislativo. Pero en el Perú todo puede pasar. No sería descabellado que los extremos otra vez se junten y veamos en un futuro intentos de vacancia donde un grupo de Perú Libre se junte con grupos de la derecha, como Renovación Popular, y puedan avanzar en una vacancia a Pedro Castillo”, detalla el analista.
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MENSAJES QUE SE REQUIEREN EN ADELANTE
Para Conterno, junto con la salida de Bellido y Maraví del Gabinete Ministerial, fue clave la mención que hizo Castillo ayer miércoles durante su mensaje a la nación sobre la inversión privada. “Esperemos que este cambio junto a medidas y acciones, no solo lo que se diga sino lo que se haga, muestre que sí se puede invertir en este país y se empiece a dinamizar la economía”, dice la ejecutiva.
Considerando este panorama, la presidenta de IPAE no deja de lado la necesidad de que se den señales claras de cambio o avance, como el hecho de que se publique la resolución suprema que yace en despacho presidencial y que ratifica a Julio Velarde como presidente del Banco Central de Reserva (BCR), o la corrección de nombramientos muy cuestionados, como los de Julián Palacín al mando de Indecopi y Mario Carhuapoma como presidente de Essalud.
“Será fundamental esperar la presentación ante el Congreso y ver qué se plantea, que haya una actitud conciliadora y favorable hacia la inversión, de tal manera que se pueda dinamizar el país y se puedan generar empleos”, resalta Conterno.
Távara remarca que los próximos años o el tiempo que el gobierno dure, “que como demócratas esperaríamos que sean los cinco años de gestión”, no van a ser años en los que tengamos períodos de tranquilidad per se, pero sí de crisis de menor intensidad o de controversias resueltas con confrontación o con diálogo al fin y al cabo.
“Esos vaivenes son los campos a ir encontrando. En los próximos días creo que pasaremos de una relación de confrontación como la que había con Bellido, a un primer momento de intentar diálogos que podrían o no tener resultados pero que nos harán ver un panorama distinto”, puntualiza.
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