Bogotá — Colombia presentó este jueves la hoja de ruta del hidrógeno verde con miras a convertirse en un jugador importante en un mercado que demandará unas 525 millones de toneladas para 2050, siendo Europa, Japón y Corea del Sur algunos de los destinos con mayores necesidades de importación.
El ministro de Minas y Energía colombiano, Diego Mesa, destacó en el evento de presentación de la hoja de ruta en Barranquilla que “el futuro del hidrógeno es hoy” y por eso el Gobierno colombiano apuesta a que en el 2022 el país tenga “por lo menos tres proyectos piloto en operación”.
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Esto con miras a lograr sus compromisos de reducir sus emisiones en un 51 % para 2030, por lo que lo la transición energética será clave en el proceso.
A 2030, “esperamos tener en producción entre 1 y 3 GW de capacidad de electrólisis, lo cual además supone cerca de 1,5 a 4 GW de capacidad instalada de energía renovable no convencional dedicada exclusivamente para la producción de hidrógeno verde”, comentó.
El funcionario destacó que entre “las regiones más favorables para producir hidrógeno verde” en el país está el Caribe norte, a partir de energía eólica y solar.
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Añadió que Colombia podría producir en 2030 hidrógeno verde a US$1,7 por kg, un precio que consideró “altamente competitivo”. De otra parte, señaló que el hidrógeno azul se podría producir a US$2,4 por kg.
El ministro subrayó las oportunidades que tiene el país en la producción del hidrógeno verde por sus recursos renovables “excepcionales”, su ubicación geográfica ideal para exportación, así como por sus abundantes reservas de carbón y de gas natural para producir hidrógeno de bajas emisiones.
Diego Mesa afirmó que entre las principales aplicaciones del hidrógeno verde destacan el transporte terrestre, “sobre todo de carga pesada”, así como el aéreo, el fluvial y marítimo.
Vemos a 2050 una demanda de cerca de 1.850 kt de hidrógeno en el país, en el muy corto plazo vemos que el sector más natural para empezar a hacer recambio de hidrógeno gris por verde o azul es el de la refinación de combustibles.
Ministro de Minas y Energía colombiano, Diego Mesa
Aunque también ve oportunidades en industrias como la del acero, cemento y papel, así como en productos agrícolas que se fabrican a partir de procesos petroquímicos, indicó en su presentación.
De acuerdo a cifras oficiales, el sector industrial representa el 22 % del consumo total de energía en el país y el de transporte tiene una cuota del 40 %.
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Mesa manifestó que el futuro de la transición energética “es el resultado de un proceso de continuidad en las políticas públicas para el sector”.
“Eso no es un tema que lo sacamos de la noche a la mañana, hay todo un trabajo de política pública y regulatoria”, así como inversión privada que ha contribuido a “apalancar” estos esfuerzos.
El potencial energético del país
Colombia tiene en la actualidad más de 740.000 cuencas hidrográficas y está dentro de los 10 países que concentran el 46 % de la oferta de agua a nivel mundial.
Además, tiene un potencial de producción de energía de 25 GW, destacando específicamente La Guajira, en donde se registran vientos de más del doble del promedio mundial (9m/s).
El país también sobrepasa el promedio mundial de radiación (4.5 Kwh/m2), según cifras presentadas por el ministro en el evento.
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Apuntó que la aprobación de la ley de transición energética generó beneficios adicionales para el hidrógeno azul y verde, así como para la geotermia, medición inteligente y sistemas de almacenamiento a gran escala.
Destacó además la subasta de octubre de 2019 que significó 14 proyectos solares y eólicos que sumaron 1,3 MW de capacidad instalada con inversiones por US$2,2 billones.
Y recordó que en la actualidad está en curso una subasta de más de 38 proyectos solares y eólicos que entrarán en operación en 2023 con una capacidad mayor o igual a 3-4 MW.
