Bogotá — Mientras que la inclusión financiera avanza a buen ritmo en el total nacional impulsada por la crisis del coronavirus, las zonas apartadas aún están rezagadas en términos de acceso a servicios financieros por parte de los adultos colombianos.
Para poner en contexto lo anterior, según datos de Banca de las Oportunidades, en 2020 el 87,8% de los adultos colombianos tenía acceso a servicios financieros, lo que representó 32 millones de personas, en 2019 la cifra era del 82,5%.
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Sin embargo en las zonas más apartadas del país, en el rural disperso, la inclusión financiera por acceso es del 56,8% y en la ruralidad es del 69%, según datos de Banca de las Oportunidades que explican que en promedio en las zonas rurales del país menos del 64% de adultos tiene acceso a estos servicios.
Aunque se destaca el papel que han jugado los corresponsales bancarios en Colombia con un total de 232.202, en las zonas más apartadas solo está el 4,4% de estos. Así se distribuye el número de corresponsales según categoría del territorio colombiano durante 2020: ciudades y aglomeraciones (170.155), intermedio (32.803), rural (18.953) y rural disperso (10.291).
Sin embargo, para complementar lo anterior, los datos de Banca de las Oportunidades también arrojan que el número de corresponsales por cada 10.000 adultos en Colombia se distribuye así: 69,7 en ciudades y aglomeraciones, 54,2 en zonas intermedias, 51,9 en la ruralidad y 44,7 en la ruralidad dispersa.
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¿Qué se está haciendo para aumentar la inclusión financiera en la ruralidad?
Freddy Castro, director de Banca de las Oportunidades, comentó que el acceso a servicios financieros en las zonas rurales del país está en promedio en 64% y la meta para el fin del cuatrienio (2022) es que esta aumente al 68%.
Castro explicó también que es urgente que las personas en la ruralidad accedan a los servicios financieros para que el país avance en equidad en este sentido. Para las personas en las zonas rurales debería ser tan fácil como para los de las ciudades acceder a un producto financiero, resaltó al añadir que también es importante avanzar en conectividad en estas zonas.
Uno de los proyectos a los que le está apostando la entidad junto a la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) es el proyecto que permitirá poner en operación los corresponsales bancarios móviles y digitales.
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Estos esquemas permitirán que trámites bancarios y ventas de seguros estén a la mano de los usuarios de las zonas más apartadas de forma fácil, rápida y segura, sin necesidad de desplazarse hasta un punto físico de una entidad financiera.
“Bancamía, Banco W, Mibanco y Nequi ya avanzan, de la mano de la Iniciativa de Finanzas Rurales de Usaid, en la etapa de acompañamiento técnico para el diseño y planeación de modelos de este esquema de corresponsalía”, explicó Banca de las Oportunidades.
Este proceso finalizará el último bimestre de este año y les permitirá a estas entidades desarrollar pilotos en municipios rurales y PDET, con el fin de seguir avanzando en mecanismos que promuevan la inclusión financiera y la reducción de brechas económicas para construir una paz sostenible en el país, concluyó la entidad.
