Bloomberg — The Crown, de Netflix, ganó el premio a la mejor serie dramática en los premios Emmy el domingo por la noche, lo que le otorgó al líder de la industria del streaming el premio más importante de la noche más importante de la industria de la televisión por primera vez.
Una exuberante pieza de época sobre la familia real británica, The Crown ganó el premio a la mejor serie dramática en su cuarta temporada, que describía el romance del príncipe Carlos con la princesa Diana, así como sus aventuras con Camilla Parker-Bowles, su futura esposa. El programa también ganó los premios a la mejor escritura y dirección de una serie dramática, así como todos los cuatro premios de actuación. “The Queen’s Gambit” de Netflix, sobre un prodigio del ajedrez, ganó el premio a la mejor serie limitada.
Los premios Emmy fueron un recordatorio de cuánto ha cambiado la industria desde que Netflix lanzó Lilyhammer, su primera serie original, en 2012. Netflix ganó más premios, 44, que cualquier cadena. Apple, que obtiene la mayor parte de sus ingresos de la venta de teléfonos inteligentes y tabletas, ganó más premios que cualquier cadena de televisión importante. Disney+, un servicio de transmisión que tiene menos de dos años, ganó más que ABC, una vez el buque insignia de su propietario, Walt Disney Co.
Este avance para el streaming perpetúa el continuo fracaso de Hollywood a la hora diversificar sus filas de escritores, directores y actores. Casi todos los ganadores eran blancos y ninguna persona de color habló como ganador hasta casi dos horas después de iniciado el programa, cuando Ru Paul se llevó a casa el premio al programa de concurso más destacado. Poco después, a Paul le siguió Debbie Allen, quien ganó el premio del gobernador.
Los premios Emmy, otorgados por la Academia de Televisión, se consideran los más altos honores en el negocio de la televisión. El programa no es visto por tanta gente como los Oscars o los Grammy y los programas de premios en general han ido perdiendo espectadores en los últimos años. Aún así, las victorias pueden proporcionar un impulso publicitario, particularmente para los nuevos servicios que buscan adquirir suscriptores y atraer talento.
Netflix ha gastado cientos de millones de dólares persiguiendo premios desde House of Cards, su primer programa en recibir elogios a nivel universal. Ha cubierto Los Ángeles con vallas publicitarias, organizado eventos públicos y enviado por correo montones de DVD a los votantes.
La compañía ha obtenido más de 100 nominaciones en los últimos cuatro años y compitió con HBO para obtener la mayor cantidad de victorias. Sin embargo, nunca había ganado el primer premio en ninguna categoría, lo que muchos ejecutivos de Hollywood tomaron como una señal de la renuencia de la industria a aceptar al forastero del streaming.
El programa de Peter Morgan sobre la familia real británica había sido nominado a mejor serie dramática en sus tres primeras temporadas. Producida por Sony Pictures y Left Bank Pictures, la serie es una de las producciones más caras de la televisión, con un costo de más de US$10 millones por episodio. El gasto de dinero es evidente en la pantalla, sobre todo en los ornamentados trajes y decorados.
The Crown superó a The Mandalorian, de Disney+, así como a otro programa de Netflix, el drama romántico Bridgerton. Si bien The Mandalorian no ganó ninguno de los principales premios Emmy, le fue bien en los Creative Arts Emmys, que se llevaron a cabo el fin de semana pasado. El programa ganó premios por composición musical, acrobacias y efectos visuales.
Apple Inc. comenzó la noche como gran ganador con Ted Lasso, su comedia sobre el entrenador estadounidense de un club de fútbol británico. El programa fue nombrado la mejor serie de comedia del año y ganó cuatro de los siete premios de comedia. La estrella Jason Sudeikis ganó el premio al mejor actor y sus coprotagonistas Hannah Waddingham y Brett Goldstein ganaron el premio a la mejor actriz y actor de reparto.
El programa fue nominado a 20 premios Emmy, la mayor cantidad en una comedia en su primer año. Es el primer gran éxito de Apple en términos de aplausos críticos, conversación en las redes sociales y prestigio de la industria, y las victorias del domingo por la noche deberían llevar a más clientes a Apple TV +, el servicio de transmisión de pago del fabricante de iPhone.
Producida por Warner Bros., Ted Lasso acaba de concluir su segunda temporada y ha sido renovada por al menos una más.
Muchas figuras de Hollywood han expresado su escepticismo sobre la incursión de Apple en la industria del entretenimiento. No ha adquirido un catálogo de programas para completar su biblioteca para Apple TV + y ha sido cauteloso a la hora de encender controversias con sus programas. Sin embargo, la compañía dominó una categoría en la gala anual más grande de la industria de la televisión menos de dos años después de presentar el servicio.
La competencia más dura de Netflix el domingo por la noche provino de HBO y HBO Max. La serie limitada Mare of Easttown ganó tres premios de actuación, incluida la de mejor actriz para Kate Winslet. Ella interpretó a Mare, una detective que investiga una serie de asesinatos en la zona rural de Pensilvania. Los coprotagonistas Evan Peters y Julianne Nicholson ganaron por sus papeles secundarios.
“Fue un momento cultural y le dio a la gente algo de qué hablar además de una pandemia global”, dijo Winslet durante su discurso de aceptación.
HBO también ganó por Last Week Tonight, su programa de noticias de actualidad, y I May Destroy You (Podría destruirte en español), una serie limitada sobre una mujer que lucha por procesar una agresión sexual de la que fue víctima.
El comediante Cedric the Entertainer fue el anfitrión del programa, que se transmitió en vivo por CBS y Paramount+. La academia organizó una ceremonia en persona en el distrito de entretenimiento LA Live en el centro de Los Ángeles. El año pasado, la academia llevó a cabo una ceremonia más pequeña, entregando las estatuillas a los ganadores en sus hogares.
“Dijeron que esto era al aire libre; no lo es“, bromeó el actor Seth Rogen al presentar el primer premio. “¿Por qué hay un techo? Es más importante que tengamos candelabros que asegurarnos de no matar a Eugene Levy“.
