Entre el bitcoin y Bukele, la deuda salvadoreña no tiene respiro

Los bonos en dólares con vencimiento en 2029 son los que más se han visto afectados.

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Bloomberg — A pesar de los bombos y platillos en torno al experimento de bitcoin en El Salvador, los operadores que están eliminando las tenencias de deuda del país ven problemas mayores a la vuelta de la esquina.

Los bonos en dólares de la nación con vencimiento en 2029 se dirigían a su mayor pérdida en cuatro meses el martes, ya que los inversores de deuda vieron más allá de la fallida (pero largamente esperada) puesta en marcha de bitcoin como moneda de curso legal y, en cambio, se centraron en un riesgo político emergente. El viernes, un tribunal superior determinó que un presidente en funciones podía presentarse a un segundo mandato, lo que permitiría al popular e imprevisible Nayib Bukele buscar la reelección.

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Entre el experimento de la criptomoneda en país y la incertidumbre de otro potencial mandato de Bukele, los administradores de dinero sopesan el riesgo de un retraso en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, especialmente después de que el presidente milenial agradeciera a la autoridad de préstamos en Twitter por la depreciación del bitcoin.

“Es un riesgo puramente político, que creció luego la noticia de la reelección y que no había sido valorado”, dijo Ramiro Blazquez, estratega de BancTrust & Co, refiriéndose a la caída de los precios de los bonos. “Aleja el acuerdo con el FMI y podría intensificar el conflicto diplomático con EE.UU”.

Los bonos con vencimiento en 2029 se desplomaron casi 5 centavos el martes, hasta los 87,6 centavos por dólar estadounidense, la mayor caída desde principios de mayo, cuando el partido de Bukele asumió el control del máximo tribunal y sustituyó al fiscal general. Esa medida para consolidar el poder también ha pesado a los inversionistas que consideran necesario un acuerdo con el FMI. El Salvador busca un préstamo de US$1.300 millones del FMI, cuyo mayor miembro con derecho a voto es EE.UU.

Un portavoz del FMI no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de Bloomberg News.

“La conclusión es que la agenda política dominante socava las relaciones diplomáticas de EE.UU., así como las perspectivas de un programa del FMI”, dijo Siobhan Morden, directora de la estrategia de renta fija de América Latina en Amherst Pierpont Securities. Aunque los riesgos de incumplimiento a corto plazo son bajos, “los riesgos de mercado aún podrían ser altos hasta que comprendamos mejor la prima de riesgo de la política de Bukele, especialmente sobre cómo planean financiarse el próximo año”.

Con la asistencia de Philip Sanders.