Bloomberg — La Unión Europea amenazó con bloquear hasta 126 millones de euros (US$ 150 millones) de fondos de cohesión a los gobiernos locales polacos por las zonas anti-LGBTQ introducidas en cinco provincias.
La Comisión Europea, el brazo ejecutivo del bloque, envió cartas a los gobernadores de las provincias la semana pasada advirtiendo que si no se rescindían las resoluciones el dinero sería retenido, según informan los medios de comunicación polacos y confirma un funcionario con conocimiento de la situación.
Los fondos congelados provienen del programa React-EU del bloque, que se puso en marcha tras la pandemia de coronavirus para ayudar a los esfuerzos de recuperación. La asignación total del país es de más de 1.500 millones de euros.
La Comisión no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la situación. Un portavoz del gobierno polaco no hizo comentarios de inmediato.
Polonia también se enfrenta a un retraso en la aprobación de 23.900 millones de euros en subvenciones del histórico estímulo contra el virus de la UE, en parte debido a la campaña del gobierno para que el máximo tribunal del país del país declare que la constitución anula algunas leyes de la UE.
Las ciudades y provincias de Polonia se han declarado “libres de la ideología LGBTQ” para evitar que se lleven a cabo desfiles del orgullo gay y otros eventos gay-friendly (accesible a los gays).
Inconstitucional
A mediados de 2020, casi un tercio de los municipios de este país católico de 38 millones de habitantes habían adoptado la declaración, a menudo después de presionar a grupos ultraconservadores.
Varios tribunales polacos han dictaminado que las medidas son inconstitucionales y discriminatorias. A pesar de que las declaraciones carecen de sentido jurídico, han alimentado el miedo y la discriminación.
Este año, la UE inició acciones legales contra Polonia y apuntó a una legislación separada en Hungría, diciendo que utilizará todos los instrumentos a su disposición para defender los derechos de las personas LGBTQ.
Con asistencia de Piotr Skolimowski.