Bloomberg — China tiene ahora menos opciones para abastecerse de carne de vacuno después de que Brasil suspendiera las exportaciones al país asiático debido al descubrimiento de dos casos de la enfermedad de las vaca loca.
Además de la suspensión temporal anunciada por Brasil, dos grandes proveedores de China, Argentina y Australia, han visto reducido este año su acceso al mayor importador mundial de carne de vacuno. Argentina ha limitado las exportaciones de vaca hasta el 31 de octubre para controlar la inflación, mientras que el producto australiano está sujeto a las restricciones comerciales impuestas por China en medio del enfriamiento de las relaciones entre ambos países.
Esto sugiere que es poco probable que la prohibición de las exportaciones de carne de vaca brasileña se extienda. Como los dos casos de la enfermedad de las vaca loca son de naturaleza “atípica”, es probable que la suspensión sea un “problema a corto plazo”, dijo Chenjun Pan, analista de Rabobank. Un caso atípico es raro y se produce de forma espontánea, a diferencia de los casos clásicos causados por alimentos contaminados.
La suspensión de las exportaciones entró en vigor el sábado y se declaró de acuerdo con los protocolos sanitarios entre Brasil y China. El gobierno de Pekín decidirá cuándo volverá a importar.
En junio de 2019, Brasil suspendió las exportaciones de carne de vaca a China tras un caso atípico de la enfermedad de las vaca loca, y la prohibición fue levantada por el gobierno chino unos 10 días después.
--Con la colaboración de Sybilla Gross