Santiago — El Consejo del Banco Central de Chile (BCCh) acordó subir la tasa de interés en 75 puntos base, hasta 1,5%. En su reunión de política monetaria, los miembros del ente emisor indicaron que la decisión, adoptada por unanimidad, responde a la “necesidad de evitar la acumulación de desequilibrios macroeconómicos que, entre otras consecuencias, podría provocar un aumento más persistente de la inflación que la lleve a desviarse de la meta de 3% a dos años plazo”.
La histórica alza superó las proyecciones del mercado, convirtiéndose en el mayor ajuste en dos décadas en Chile. Los analistas esperaban que la tasa de interés alcanzara el 1% en agosto, y que llegara a 1,5% en los próximos cinco meses, según la última Encuesta de Expectativas Económicas (EEE). Esta se mantuvo en su mínimo técnico (0.50%) desde el inicio de la pandemia de Covid-19, pero en julio el Banco Central comenzó un aumento gradual.
La explicación del organismo es que el mayor crecimiento económico y la fuerte expansión del consumo prácticamente “cerraron la brecha de actividad en el segundo trimestre, y la volverán positiva en lo venidero, elevando la presión sobre los precios”. Según un comunicado, esto supone un alza de la inflación y eleva las perspectivas de corto plazo. “Se suma en este resultado el desfavorable comportamiento de otras variables relevantes para la inflación, como el mayor traspaso cambiario de la depreciación idiosincrática del peso, una oferta global que aún no ha logrado reestablecerse completamente tras la pandemia y el aumento del precio de los combustibles”.
Esta sería la principal razón para intensificar el retiro del estímulo monetario. De acuerdo con el Banco Central, el desempeño de los mercados financieros sigue “ampliamente dominado por factores idiosincráticos, entre los que destaca la posibilidad de nuevos retiros masivos de ahorros previsionales” en Chile. “Las tasas de interés del mercado de renta fija consignan alzas adicionales desde la reunión (de política monetaria) pasada, sobre todo en la parte corta de la curva nominal. Las tasas a 10 años también subieron, ampliando la distancia con sus pares externos. Esto contrasta con la caída significativa de los rendimientos en UF de más corto plazo, ligado al incremento de las expectativas de inflación, especialmente tras la sorpresa en el dato del IPC de julio”, argumenta la institución.