Bloomberg — Estados Unidos proporcionará US$32 millones adicionales en ayuda a Haití, mientras el país caribeño se esfuerza por recuperarse del devastador terremoto del 14 de agosto que causó al menos 2.207 muertos y dejó a más de 100.000 personas sin hogar en medio de una temporada de huracanes.
Samantha Power, directora de la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID por sus siglas en inglés), dijo que el dinero se destinará a refugios, atención sanitaria, alimentos, agua “y otras prioridades urgentes para salvar vidas”.
En su intervención en Puerto Príncipe, tras visitar la zona del terremoto en el sur del país, Power dijo que EE.UU. estaba comprometido a aprender de los errores del terremoto de 2010, cuando los productos importados socavaron los mercados locales. Dijo que su departamento estaba alentando a que todas las compras de ayuda se hicieran localmente cuando fuera posible.
“Ninguna agencia de desarrollo, ningún ejército o cuerpo diplomático puede importar una respuesta humanitaria perfecta desde lejos”, dijo. “Se necesita experiencia y liderazgo local para llegar a las comunidades necesitadas”.
Funcionarios de Haití dijeron que el terremoto dañó o destruyó más de 120.000 estructuras y dejó más de 12.268 heridos.
Dos semanas después del terremoto, algunas comunidades rurales se quejan de que no haber recibido ayuda. Algunos pueblos siguen siendo accesibles únicamente por vía aérea, ya que los puentes están caídos y las carreteras bloqueadas, pero algunas personas también se han quejado de la desorganización por parte del gobierno.
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El primer ministro Ariel Henry, que también intervino en el acto del jueves, defendió la respuesta de su administración, afirmando que “no hay caos” en la entrega de la ayuda.
“Nuestro país está en una situación difícil social, política y económicamente”, dijo, “y este terremoto lo ha agravado todo”.
El terremoto se produjo a menos de dos meses después del asesinato del presidente Jovenel Moise y en medio de una ola de violencia criminal.
Naciones Unidas ha pedido a la comunidad internacional que done US$187 millones como respuesta inicial al terremoto.