Buenos Aires — El 12 de septiembre son las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en Argentina, que definirán a los candidatos que el 14 de noviembre disputarán por un lugar en el Congreso y definirán la dinámica de poder del Frente de Todos para los próximos dos años.
Se trata de 24 elecciones distintas. Cada provincia tiene sus propios candidatos y sus lógicas internas. Pero los analistas coinciden en que el resultado será un termómetro respecto a lo que la sociedad piensa sobre la marcha del país. Ese termómetro será aún más preciso en las zonas urbanas, en general, y en la provincia de Buenos Aires en particular, donde se concentra más de un tercio del padrón electoral nacional.
Rumbo a las PASO, surgen varias interrogantes: ¿Cómo impactará la pandemia en la jornada electoral? ¿Habrá menos participación? ¿El Frente de Todos y Juntos por el Cambio ─los principales espacios─ mantendrán el nivel de adhesión de elecciones pasadas? ¿Cómo se refleja el descontento de la sociedad que hay sobre la política? ¿Qué ocurrirá con los espacios emergentes, las terceras vías y las fuerzas liberales? ¿Cómo repercute la reciente revelación sobre encuentros en la quinta presidencial de Olivos incumpliendo el ASPO?
Bloomberg Línea consultó a distintos especialistas con el objetivo de resolver algunas de esas interrogantes.
¿Bajará la participación electoral?
En Argentina el voto es obligatorio, excepto para la franja entre los 16 y los 18 años y los mayores de 70 años. Aún así, su cumplimiento no es efectivo. En las PASO del 2013, 2015, 2017 y el 2019 la participación osciló entre el 72% y el 76%.
“Si uno mira hacia atrás la participación se ha mantenido relativamente estable, no han habido grandes fluctuaciones desde la vuelta a la democracia. Pero en el último tiempo hay factores que despiertan factores de alerta”, señala Ana Iparraguirre ─politóloga, directora de Dynamis Consulting─ incluyendo a la pandemia como uno de esos factores.
- Elecciones pandémicas: Ya en escenario de pandemia, en Argentina se han realizado 3 elecciones: legislativas provinciales en Misiones y Salta y elección de intendente en Río Cuarto Córdoba.
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Para Iparraguirre, “esos antecedentes muestran una caída en la participación que promedia el 13%, y si eso se replica a nivel nacional estaríamos en alrededor del 60%” del padrón, señala Iparraguirre. A nivel internacional mermó la cantidad de votantes en más de la mitad de los comicios realizados, mientras que en el 30% de los comicios, subió, agregó.
“Los resultados de las provincias no necesariamente son un indicador de la afluencia, porque a nivel nacional es otra la movilización”, anota Diego Reynoso, Investigador del CONICET y profesor de opinión pública de la Universidad del San Andrés.
En tanto, Julio Burdman ─politólogo, profesor de la UBA y director de Observatorio Electoral Consultores─ sostiene que: “hay una presunción de que la participación puede ser más baja, por los niveles de apatía e indecisión en menores de 29 años que llega a 30 puntos”.
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Apatía
Los números reflejan “mucha apatía” entre los votantes, según Reynoso.
“Hay apatía más que bronca, cualitativamente se ve una franja importante muy apática, desilusionada, deprimida, que le cuesta visualizar una salida hacia el futuro”, coincide Iparraguirre, y en ese sentido, es “difícil movilizar un voto bronca o de entusiasmo”, como ha ocurrido en elecciones pasadas.
¿Cómo se canalizará ese sentimiento?
- Candidatos alternativos: “Las terceras opciones son débiles y concentradas en la Capital y en menor medida en la provincia de Buenos Aires, la sospecha es si no habrá un aumento del voto en blanco y una menor concurrencia”, indica Burdman.
- En blanco: “El voto en blanco en Salta capital fue muy grande, fue un voto protesta y es una cuestión a tener en cuenta”, agrega Iparaguirre.
- Según Reynoso, esa apatía “podría ir hacia el voto en blanco pero también por el lado de los libertarios, que buscan capitalizar el enojo y hartazgo con el sistema político”.
Los favoritos
No hay encuesta que indique una ruptura de la centralidad que hoy mantienen el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Además, podrían beneficiarse de una caída en la participación. Iparraguirre señala que “la baja participación juega a favor de la polarización, mientras que una ciudadanía más activa favorece a los candidatos que no representan a los partidos tradicionales”.
No obstante, la politóloga indica que “en Argentina hay hartazgo muy fuerte con la dirigencia política, eso no se traduce ahora en un enojo fuerte, sino más bien en una depresión grande en la sociedad”.
¿Y la tercera vía?
El peronismo no kirchnerista estará representado en esta elección por “Vamos con Vos”, el espacio que conduce el ex ministro de Interior y Transporte Florencio Randazzo, acompañado por la dirigente de la UIA Carolina Castro. Según Burdman, este espacio está “limitado”, debido a que “no tiene mucha instalación” y no cuenta “con una buena oferta a nivel provincial en todas las secciones electorales”.
Reynoso sostiene que hay un voto importante para el peronista descontento con el Gobierno, pero es poco probable que el ex ministro logre capitalizarlo.
“En marzo, mayo, nuestras encuestas marcaban que había un mercado electoral para esa oferta, pero hoy nuestros sondeos no reflejan que Randazzo vaya a quedarse con ese voto”.
Burdman, por su parte, agrega que los espacios peronistas más alejados del kirchnerismo ya están representados tanto en el Frente de Todos como en Juntos por el Cambio.
- Sergio Massa, que compitió en 2013, 2015 y 2017 contra el kirchnerismo, es un aliado clave del Frente de Todos.
- Emilio Monzó y Joaquín de la Torre, dos dirigentes bonaerense de origen peronista, participan de la lista de Juntos de Facundo Manes.
¿Qué pasa con los libertarios?
Javier Milei y Ricardo López Murphy en la Ciudad de Buenos Aires y José Luis Espert en la provincia de Buenos Aires son algunas de las caras de las fuerzas liberales, fuerzas que debutaron en 2019 y que, con gran presencia en los medios nacionales, apuestan a seguir creciendo en este turno.
- Potencial: “Arriba de 5 puntos para los liberales sería una buena elección, de 8 a 10, muy buena. Y los sondeos a nivel nacional nos están dando eso”, marca Reynoso.
Iparraguirre hace hincapié en el apoyo de los más jóvenes hacia estos espacios.
“El voto jóven está con una dinámica muy particular, hubo un movimiento a la inversa. Mientras que años atrás los jóvenes se ubicaban más cercanos al kirchnerismo, por el sentido más comunitario que reflejaba ese espacio, hoy se van alejando y el apoyo no es tan fuerte y comienzan a acompañar ideas más de derecha”, sostiene.
- Lineamientos: Según Iparraguire, los liberales lograron capitalizar conceptos que hoy son importantes, como la “libertad” y la “frustración con la clase política”.
¿Cómo impacta el Olivos Gate?
Las revelaciones de las reuniones que el presidente Alberto Fernández protagonizó mientras regía una estricta cuarentena han impactado en la imagen y credibilidad del Poder Ejecutivo, pero aún hay expectativa e incertidumbre respecto a cómo impactarán estos eventos en el electorado.
Los niveles de indignación que generaron estas fotos son altos, según los especialistas, no obstante, no hay certezas de que estos episodios logren alterar el sentido del voto de los electores que en 2019 apostaron por Alberto Fernández.
Más allá del impacto electoral en el núcleo duro del Frente de Todos, el impacto en la imagen del Presidente ha sido contundente:
- “El escándalo corona la caída en la imagen de Alberto Fernández”, sostiene Burdman.
- Según Diego Reynoso, “la foto tiene un impacto decisivo en la credibilidad del presidente”.
- Iparaguirre asegura que el Gobierno enfrenta un “espiral descendente que es muy difícil revertir, que se retroalimenta”.
