Caracas — A casi tres meses de que se celebren las elecciones regionales en Venezuela, se cuentan avances pero hay, aún, cosas pendientes.
En primer lugar, la oposición mayoritaria, agrupada en torno a la figura de Juan Guaidó -quien es reconocido como presidente interino de Venezuela por decenas de países del mundo, encabezados por los EEUU-, aún no define si participará en el proceso.
“El gran reto es cómo esa inmensa mayoría la podemos canalizar y ejercerla de cara a una solución, y ese es el debate que tenemos en este momento de cara al 21 de noviembre”, dijo Guaidó en entrevista con Bloomberg Línea, el pasado 27 de julio.
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Casi un mes ha pasado desde entonces y desde las propias entrañas de la coalición opositora se suman los exhortos a tomar una pronta decisión.
La semana pasada, lo hizo el dos veces candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski. “Yo voy a votar el 21 de noviembre”, dijo en una sorpresiva rueda de prensa que ofreció el pasado 11 de agosto, y en la que instó a sus colegas opositores a postular candidatos, de manera unitaria y utilizando la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD, coalición de partidos opositores).
Capriles retomó la conversación este jueves, a través de su cuenta de Twitter, donde insistió en que para definir las candidaturas unitarias, era necesario tomar en cuenta los “liderazgos reales que se han venido forjando en cada pueblo, en cada estado”.
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Y este jueves fue el turno de Tomás Guanipa, quien hasta la semana pasada fue representante de Guaidó en Bogotá, cargo del que se separó para sumarse a la delegación opositora que negociará con el gobierno de Nicolás Maduro en México.
Tras dos años en el exilio, Guanipa ofreció una rueda de prensa este viernes, en la que aseguró que su regreso a Venezuela no obedecía a la negociación. “Simplemente se da en un momento que decidí personalmente regresar a Venezuela. Nadie me ha exigido o pedido o ha habido ningún tipo de barajita de cambio por mi regreso”, acotó.
En cualquier caso, Guanipa dijo que su partido, Primero Justicia, el mismo de Capriles y uno de los cuatro principales de la oposición mayoritaria, quedaba a disposición de la “Unidad” (en referencia a la coalición opositora) y que acatará la decisión que se tome sobre la participación en el proceso del 21 de noviembre.
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Pero acotó: “Primero justicia está listo para cualquier eventualidad porque aquí hay hombres y mujeres que han construido en sus estados. Vamos a seguir luchando por condiciones electorales de verdad, no farsas (...) Le hacemos un llamado a la Unidad, es momento de tomar decisiones”.
Guanipa insistió en que la decisión debe ser anunciada “cuanto antes”. “Si la elección del 21 de noviembre va a contar con la participación de la unidad debemos explicarle a la gente que sería un mecanismo para organizarnos, resistir y movilizarnos”, acotó.
Habla el rector
En conversación con los miembros de la Asociación de Prensa Extranjera (APEX) de Venezuela, en Caracas, este jueves, el rector Roberto Picón, uno de dos -de cinco que son en total- que no es afín al Gobierno, explicó por qué -a su juicio- esta vez hay mayor disposición a participar en el proceso.
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“Creo que hay una conciencia dentro de buena parte de la ciudadanía y los actores políticos, en que la no participación no funcionó para generar un cambio político”, dijo Picón, quien considera además que el reciente cambio en la Junta Directiva del Consejo Nacional Electoral “les disminuye (a los actores políticos) el costo de entrar ahora en esta dinámica”.
Capriles lo dijo en su alocución de la semana pasada: “Que Enrique Márquez y Roberto Picón estén en el CNE para mí si es una garantía, eso no lo teníamos el año pasado”.
En su conversación con los corresponsales, en la tarde del jueves, Picón hizo un recuento de condiciones técnicas que han garantizado y las políticas en las que están trabajado.
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Detalló, en particular, los resultados del proceso de auditoría de seis semanas, que culminó en esta, del hardware, software y el proceso de captura de información del voto.
“El producto que se tiene, tanto de punto de vista de hardware y de software, garantiza que el voto es secreto y que es íntegro, y que no hay ninguna intervención de factores externos entre que el elector se identifica, emite su voto, ese voto se totaliza en la máquina, se imprime el acta de votación, se transmite y se totaliza en Caracas”, aseguró Picón.
Picón, sin embargo, reconoció que están construyendo las que llama “condiciones políticas”, tales como la rehabilitación de líderes políticos -que, insistió, no dependen solamente del CNE-, garantizar el equilibrio en los medios de comunicación social y en las campaña electoral y la vigilancia de imparcialidad de distintas instancias del Estado ante el hecho electoral, entre otras.
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“Todas esas cosas hay que trabajarlas todavía, son condiciones más políticas que técnicas, pero estamos conscientes de que hay que dar señales en esos temas (políticos), como se han dado señales en los temas técnicos”, insistió.
Según Picón, a todos los actores del CNE les interesa que las elecciones sean reconocidas, “y no van a ser reconocidas si no cuentan con condiciones objetivamente distintas”, aseguró.
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