Ciudad de México — El plan del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de usar 12,000 millones de dólares provenientes del Fondo Monetario Internacional (FMI) se topó con pared, ya que esos recursos son Derechos Especiales de Giro (DEG) que son clasificados por el fondo como activos de reservas internacionales.
Los países miembros del FMI aprobaron a inicio de agosto la asignación de DEG por US$650.000 millones para apoyar la liquidez mundial e impulsar la recuperación de la crisis del COVID-19; la asignación entrará en vigor el 23 de agosto de 2021.
“En el caso de México le corresponden alrededor de 12.000 millones de dólares, este es un recurso que va al Banco de México para las reservas; nosotros podríamos utilizar ese recurso para que no esté sólo en reservas, porque han crecido mucho ya las reservas, además les pagan muy poco de rendimiento, entonces tienen mucho dinero y reciben muy poco de rendimiento, entonces nosotros podríamos utilizar esos recursos para pagar deuda por anticipado”, dijo en su conferencia matutina la mañana del 11 de agosto.
Luego del plan delineado por el presidente, el subgobernador de Banco de México (Banxico), Gerardo Esquivel, aclaró esta tarde a través de su cuenta de Twitter que los Derechos Especiales de Giro no son una moneda, sino un activo de reserva internacional.
“En México, por mandato de ley, los activos de reserva internacional no se pueden usar para pagar deuda”
dijo Esquivel a través de su cuenta de Twitter.
De acuerdo con el FMI, los DEG son un activo de reserva internacional creado en 1969 para complementar las reservas oficiales de los países miembros, asimismo, una asignación general de DEG debe ceñirse al objetivo de atender la necesidad mundial a largo plazo de complementar los activos de reserva.
Sobre la posibilidad de usar los DEG para pagar deuda del gobierno federal, Marco Oviedo, analista económico, consideró que es posible que la asignación de adicional pueda ser transferida al gobierno federal directamente tras una resolución de la Comisión de Cambios.
La Comisión de Cambios es el órgano encargado de la política cambiaria en México y está integrada por el secretario y el subsecretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), otro subsecretario de la dependencia, el gobernador de Banco de México y dos miembros de la Junta de gobierno del propio banco central.
“Habría que argumentar qué es para mejorar la posición macroeconómica del país, a través de un menor nivel de deuda. Por única vez. El FMI tendría también que estar de acuerdo. Otro argumento es para financiar algún programa fiscal contracíclico, pero se ve más complicado”, explicó el execonomista en Jefe para América Latina en Barclays.
Ante un escenario en el que los DEG ingresen a las reservas internacionales y después desde esa cartera se haga una transferencia al gobierno federal para el pago de deuda, señaló que “si los derechos especiales ingresan como reservas, estaría más complicado. Eso quizás genere dudas sobre el rol de las reservas y generaría más desconfianza”.
AMLO aplaude a estados sin deuda
El presidente aplaudió que Tlaxcala y Querétaro son las dos entidades del país que no tienen problemas de deuda y aseguró que, en el caso de la deuda del gobierno federal, la meta es reducirla como porcentaje del PIB hacia final del sexenio.
Indicó que, en 2019, el primer año de gobierno, la deuda se ubicó en 44% como porcentaje del PIB, sin embargo, en 2020, el impacto de la pandemia llevó la deuda pública a un nivel de 52% del PIB, por lo que ahora el objetivo es mantenerla en niveles de 49%.
López Obrador destacó que, en el caso de los gobiernos estatales, Tlaxcala y Querétaro son ejemplo del buen manejo de la deuda. Por un lado, Tlaxcala, no puede contratar deuda de acuerdo con sus propias leyes, y por el otro, Querétaro sí está facultado legalmente para contratar deuda, no obstante, este 2021 prácticamente terminó de pagar sus deudas.
“Eso es digno de reconocimiento, pero hay otros (estados) que actuaron mal, no supieron administrar bien los fondos”, expresó.
La SHCP cuenta con el Sistema de Alertas que funciona como un semáforo y que cada trimestre asigna a 31 de 32 entidades del país (se excluye Tlaxcala) el color verde si su endeudamiento es sostenible, amarillo si está en observación o rojo si es deuda elevada.
Al primer trimestre del 2021, el Sistema de Alertas arrojó que Querétaro se encuentra en color verde, ya que su deuda es de 142.7 millones de pesos mexicanos y representa solo 0,8% del total respecto de sus Ingresos de Libre Disposición (17,605 millones de pesos mexicanos). Los Ingresos de Libre Disposición incluyen ingresos locales más las Participaciones federales.
De acuerdo con el sistema, no hay ningún estado en color rojo con endeudamiento elevado; las estadísticas muestran que hay 26 estados en color verde con endeudamiento sostenible y solo cinco entidades se encuentran en color amarillo con deuda en observación.
Coahuila Chihuahua, Durango, Nuevo León y Quintana Roo son los cinco estados que están en semáforo amarillo, que implica deuda en observación.