Caracas — El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) reveló este lunes que la variación de precios en Venezuela se aceleró a 19% durante el mes de julio, con lo que la inflación interanual se ubicó en 1.084% y la acumulada en 415,7%.
En los últimos meses, las tasas extraoficiales registradas por esta organización habían sido menores (6% en junio, por ejemplo), lo que hizo que la variación acumulada de precios disminuyera de 2.000% por primera vez desde el año 2017. Todavía, sin embargo, y a juicio de este y otros especialistas locales, no se puede cantar victoria sobre la hiperinflación.
“Es un fenómeno que hay que ir evaluando, y hay riesgo de que esto no sea así”, dijo, durante la rueda de prensa en la que se dieron a conocer los datos, el economista y fundador del OVF, Ángel Alvarado, quien es diputado de la Asamblea Nacional (AN) electa en 2015 y presidida por el líder opositor Juan Guaidó. “Siguen siendo números escandalosos para cualquier país del mundo. Son números de un país en hiperinflación”, acotó.
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De hecho, y en sintonía con lo expresado por otros expertos locales como Omar Zambrano, quien conversó en la tarde de este lunes con Bloomberg Línea y demás miembros de la Asociación de Prensa Extranjera en Venezuela (APEX), es posible que el país vuelva a registrar tasas de inflación mensuales de 50% -o incluso superiores a esa cifra, según Alvarado- en lo que resta de año, sobre todo hacia el final de este.
“El tipo de cambio se está moviendo con velocidad, falta un trimestre sumamente duro, que es el último trimestre del año, en el cual hay un gasto público que se acelera, sobre todo cuando hay episodios electorales”, acotó Alvarado.
Y no es el único que lo piensa. “Seguramente con la inyección de gasto que se viene con las elecciones de noviembre vamos a volver al umbral de la hiperinflación (...) no pareciera tener fin todavía”, dijo Zambrano durante el mencionado encuentro con los corresponsales.
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¿Por qué se aceleró la inflación en Venezuela?
Alvarado se remite a la tasa de liquidez monetaria, que se elevó a 46%, y un tipo de cambio que a su juicio está “fuera de control”, en relación con el que se tuvo de abril a junio.
“Hay unas necesidades, unas presiones de liquidez monetaria que, en mi opinión, se han trasladado al tipo de cambio, en 24%, pero no todavía. Lo que va a terminar ocurriendo es que el tipo de cambio se va a depreciar en esa tasa de 50%, y eventualmente las variaciones que no ocurrieron en julio, van a ocurrir en agosto”, vaticinó Alvarado, quien nuevamente se remite al cronograma electoral en curso como causa.
“Creo que el segundo semestre del año vamos a tener aceleraciones de la liquidez del tipo de cambio, y por eso, y por tanto, también de la variación de precios”, acotó.
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¿Cuáles son los rubros más afectados?
De acuerdo con los datos del OVF, la variación más alta se registró en el rubro de educación (36,1%), seguida por el equipamiento del hogar (31,6%) y esparcimiento (27,2%).
“La vida cotidiana es cada vez más difícil. Es ir limitando al sujeto a las menores condiciones posibles para que pueda depender de lo poco que se le pueda otorgar de parte del Estado”, dijo, en la misma rueda de prensa en la que se presentaron los datos, Mirla Pérez, del Centro de Investigaciones Populares, al hacer referencia a las implicaciones sobre los venezolanos.
La variación en el rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas (19,4%) se mantuvo dentro del promedio global. Sin embargo, Alvarado destacó que la canasta alimentaria se mantiene sobre la barrera de los 300 dólares, al ubicarse en 303,80 dólares.
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Pérez detalló que eso significa que, en una familia de cinco personas, cada miembro debería aportar 60 dólares para la comida, lo que a su juicio es una suma “imposible” de cumplir. En total, se requieren de 162 sueldos mínimos -de 7 millones de bolívares, menos de 2 dólares al cambio-, solo para alimentos de una familia.
“El venezolano no tiene las condiciones para poder solventar el tema de la alimentación, hace que la persona sea vulnerable, en el sentido que no tiene el trabajo, la capacidad adquisitiva para poder llevar a flote a toda la familia, con el ingreso que tiene no cubre 99,12% de la canasta alimentaria. Eso es hambre”, consideró Pérez.
Y probablemente esta continúe siendo la realidad de muchos. “Esta tendencia (en el valor de la canasta alimentaria) sigue al alza. Esto porque hay rezagos del tipo de cambio, el tipo de cambio no está mostrando toda la variación de precios, y por eso la vida se está encareciendo en Venezuela hasta el punto de ser el país más caro del mundo según el índice de Big Mac”, acotó Alvarado.
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En cuanto a los rubros de los servicios públicos y comunicación, estos se mantuvieron por debajo del promedio, con 14,6% y 15,8%, respectivamente. “Ya que estamos en un proceso electoral es posible que estos rubros no se muevan tan rápido como ocurrió el año pasado, pero igual son rubros que hay que seguir evaluando”, dijo Alvarado.
¿Cuáles son las cifras oficiales?
El Banco Central de Venezuela (BCV) no actualiza sus datos de inflación desde el mes de junio, cuando reveló las cifras oficiales correspondientes a mayo, según las cuales, la inflación fue de 28,5% ese mes, la acumulada de 264,8% y la interanual de 2.719,47%.
Desde hace más de cinco años, el Instituto Nacional de Estadística (INE, ente oficial a cargo) no publica datos sobre el valor de la canasta alimentaria en el país.
