Siguen las estafas en Colombia con el nombre de la pirámide DMG

Las autoridades económicas recordaron que entidades como GRUPO Holding y DMG” y “Proyecciones e Inversiones DMG” no están autorizadas para captar dinero del público.

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Bogota — Han pasado casi 15 años desde que se reventó la pirámide que inventó David Murcia Guzmán en Colombia, pero siguen existiendo incautos que invierten sus recursos bajo las promesas rentabilidades que no se encuentran en el sistema financiero en ningún producto de inversión.

En las últimas horas la Superintendencia Financiera de Colombia -SFC – advirtió que las firmas denominadas “Grupo Holding y DMG” y “Proyecciones e Inversiones DMG” o cualquier variación que incluya la sigla DMG no cuentan con autorización para recaudar dineros del público.

Alertó el órgano de control y vigilancia que las mencionadas denominaciones vienen siendo promocionadas a través de volantes publicitarios prometiendo falsamente el pago de intereses de hasta el 200% a quienes entreguen sus recursos.

El único medio de contacto son números de celular que aparecen en dichas piezas sin referenciar ningún domicilio o ubicación física.

Es por ello que recordó que el empleo de la sigla “DMG” y las variaciones mencionadas hacen referencia a una captadora ilegal de dineros del público a la cual tanto la SFC como la Superintendencia de Sociedades le ordenaron suspender de forma inmediata la actividad ilegal.

La única actividad legal con respecto a dicha denominación es la que realiza María Mercedes Perry, agente liquidadora designada por la Superintendencia de Sociedades.

El 18 de noviembre de 2008 fue encargada por el Gobierno de la incautación y aprehensión de bienes en el proceso de intervención y liquidación judicial de la pirámide de David Murcia Guzmán y de DMG Grupo Holding S. A., para fines de su devolución a terceros, y manejo de los procesos penales respectivos.

Durante las investigaciones administrativas y tomas de información a la sociedad DMG Grupo Holding S.A., SuperSociedades encontró hechos notorios y objetivos de captación y recaudo de dineros sin autorización.

Perry ha estado al frente de otros proceso de liquidación como el de la extinta Proyectar Valores en 2011 en donde fue agente especial, la Dirección Nacional de Estupefacientes, en 2014, el Banco Cafetero en 2010, el Banco del Estado en 2009 y la desfalcada Caja Agraria en 2005, entre otros.

Cabe señalar además que las personas naturales propietarias de “DMG”, así como las administradoras de tal captadora ilegal también fueron condenadas penalmente por el mismo delito.

La captadora ilegal de dinero denominada “DMG”, “DMG Inversiones” o cualquiera que sea la variación en el nombre donde se emplee la sigla “DMG” no cuenta con autorización legal para operar, ni tampoco está vigilada, autorizada o avalada por la Superintendencia Financiera ni por la Superintendencia de Sociedades o alguna autoridad a nivel nacional, departamental o municipal.

En consecuencia, “DMG” o sus similares no tienen autorización para ofrecer en Colombia ninguna clase de productos o servicios financieros, entre los cuales se encuentra la recepción de recursos del público en forma masiva y habitual.

La caída de un imperio

En 2008 la Superintendencia de Sociedades intervino DMG, la pirámide más famosa que ha existido en Colombia y que tuvo bajo su sombrilla al menos nueve sociedades con las cuales hacia captación ilegal de dinero, motivo por el cual pagaron cárcel varios de sus dueños.

El negocio estuvo a lo largo y ancho de todo el territorio nacional y los incautos inversionistas sacaban electrodomésticos como parte de pago del esquema de captación ilegal de dinero que ofrecían.

El esquema que logró ser identificad se basaba en pedir fuertes sumas de efectivo para luego entregar rendimiento e intereses. Entre las opciones y alternativas que ofrecía la captadora esta la de comprar productos en las mismas oficinas de DMG.

Los tentáculos de David Murcia Guzmán llegaron hasta Panamá, Venezuela y Ecuador. Las autoridades en Colombia estimaron que entre 2007 y 2008 captó e forma irregular US$2.000 millones. Se calcula que un millón de inversionistas perdieron todo, o casi todo, lo que entregaron.

Pese a las investigaciones y a las pruebas del delito, las autoridades no lograron identificar más de $95.000 millones para la reparación a las víctimas.

En 2009 David Murcia fue extraditado y pagó diez años de prisión en los Estados Unidos. Regresó a Colombia en 2019 con una sentencia por cumplir de 22 años.