Caracas — Medios estadounidenses dieron a conocer este martes la noticia de que el empresario sirio-venezolano Naman Wakil había sido arrestado por autoridades de ese país, a solicitud de la Unidad de Investigaciones de Seguridad Nacional, por conspiración de lavado de dinero.
Según indicó El Nuevo Herald, Wakil fue acusado de acumular ilícitamente una fortuna de cientos de millones de dólares a través de contratos de alimentos y petróleo con el gobierno venezolano y luego desviar parte del dinero sucio hacia el mercado inmobiliario de Miami-Dade.
El empresario, de 59 años, nació en Alepo y se nacionalizó como venezolano en 1986.
Pasó de ser vendedor ambulante en el barrio de Petare, al este de Caracas, a uno de los más importantes contratistas del régimen venezolano.
Su negocio, sin embargo, consistió en comprar carne y aves de corral baratas en Brasil, algunas a punto de vencerse, y venderlos a sobreprecio a empresas estatales venezolanas. Protagonizó pérdidas mil millonarias de alimentos podridos en contenedores que se quedaron en los puertos venezolanos, un escándalo que fue conocido como Pudreval (por estar destinados a Pdval, una de las empresas del Estado).
En solo unos años, publicó Bloomberg News en 2019, a partir de una investigación de legisladores opositores venezolanos, Wakil aseguró contratos estatales por valor de cientos de millones de dólares. En junio de 2012, por ejemplo, Wakil suministró al Ministerio de Alimentación de Venezuela 70 mil toneladas métricas de carne de res, pasta y aceite de cocina; y pagó 5.340 dólares por tonelada de carne de res.
Según datos de los Papeles de Panamá, la filtración del bufete panameño Mossack Fonseca, llegó a amasar, para 2015, una fortuna de 400 millones de dólares.
En Panamá, de hecho, según información del registro local, sistematizada por el Proyecto de Reportería sobre Crimen Organizado y Corrupción (OCCRP, por sus siglas en inglés) ha estado vinculado con al menos ocho empresas, en siete de ellas como presidente, y en la restante como vicepresidente.
En su mayoría se trata de empresas vinculadas al negocio de los alimentos, como Alimentos Universal Trading Corp, All Food Universal Corp, Perdigao Agroindustrial Group Inc o Doux Frangosul S/A Agro Avícola Industrial SA. También empresas de comercio, como M&V Trading International.
En la base de datos de propiedades de la Florida, en Estados Unidos, aparece vinculado con al menos tres propiedades en Miami, dos de ellas en la avenida Brickel. Pero para 2019, Bloomberg News decía que él y su familia poseían al menos 11 propiedades en Miami, la mayoría de ellas a través de compañías que controlaban para la fecha.
Entre otras, destacan un apartamento de lujo cerca de la Bahía de Biscayne, en Coconut Grove, que, de acuerdo con información sustraída por Bloomberg de los registros de propiedad, Wakil habría comprado por 3,2 millones de dólares, en 2011. También un un condominio de 5,6 millones de dólares en la Porsche Design Tower, comprado en 2016.
Además de en Papeles de Panamá, su nombre había salido a relucir en la Offshore Leaks, otro de los proyectos del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés), por haber sido director, a partir de 2006, de Atlas Defense and Communications Corp., empresa vinculada con uno de los intermediarios identificados en esta filtración y las subsiguientes: el International Management & Trust, de Panamá.
Según reveló Bloomberg en 2019, a partir de una investigación de transacciones sospechosas de legisladores opositores, Wakil habría ordenado al CBH Compagnie Bancaire Helvetique (mejor conocido como CBH Bank) transferir, entre 2012 y 2013, 5,9 millones de dólares a familiares del exministro de Alimentación venezolano, Carlos Osorio, quien se decía era su cuñado, pero que este miércoles se aclaró que no era así en medios locales.
Ya para la fecha de publicación de esa historia, dos fuentes aseguraron a Bloomberg que fiscales estadounidenses estaban investigando los contratos de Wakil como parte de una amplia investigación de la corrupción venezolana.