Miami — Comprar algo en cuotas tradicionalmente requería la posesión de una tarjeta de crédito, pero es acceso al crédito en México y en Latinoamérica en general no es siempre fácil. De hecho, en México, solo el 11% de la población tiene tarjeta de crédito. Aunque muchas otras fintechs de la región, como Nubank y alt.bank, han creado tarjetas de crédito con límites más bajos para alcanzar a un público más amplio, Aplazo, nueva startup mexicana, adopta otro enfoque.
En cambio, la empresa ofrece una plataforma omnicanal “compre ahora, páguelo después” (BNPL, en inglés) que permite que los usuarios paguen cuotas de igual valor en línea o en las tiendas, sin usar una tarjeta de crédito, como otras plataformas de pago en línea, como PayPal.
Hoy, la startup, que tiene menos de un año, anunció el cierre de su ronda de inversión de US$ 5,25 millones, liderada por Kaszek Ventures y con participación de Picus Capital y Woodson Capital.
“Vemos a nuestra plataforma como la base de la democratización del crédito en Latinoamérica”, dijo Ángel Peña, CEO y cofundador de Aplazo.
Para seleccionar clientes que pagarán las cuotas oportunamente, Aplazo utiliza la suscripción de Open Banking para evaluar la capacidad de crédito de los consumidores y determinar el nivel de accesibilidad para ofrecer productos de crédito justos a los consumidores desatendidos. Este enfoque también beneficia a los comerciantes, que tendrán tasas de conversión más altas y valores promedios de pedidos más altos.
Como muchos otros productos de crédito, Aplazo tiene un costo, aunque pequeño. “Cobramos de los comerciantes una tasa de procesamiento y, a veces, cobramos de los usuarios una tasa fija, según el contrato del comerciante”, dijo Peña a Bloomberg Línea.
El comprador medio que usa a Aplazo tiene 33 años y alrededor del 45% de los clientes de Aplazo son mujeres.
La empresa fue fundada en abril de 2020 y lanzada en noviembre del mismo año. En este corto período, ella se ha establecido como una empresa en hipercrecimiento, mismo todavía estando en la infancia. Aplazo ya ha establecido asociaciones con más de 500 comerciantes en México, está creciendo el 40% mes a mes y tiene 32 empleados.
“Estamos permitiendo que los comerciantes se conecten con los consumidores, muchos de los cuales no tienen tarjeta de crédito y tienen una historia de crédito limitada… Aplazo ya es una forma de pago indispensable para nuestros comerciantes asociados, representando una parte significativa de su volumen de transacciones y les ayudando a aumentar la conversión y las compras repetidas”, afirmó Peña.
Anteriormente, Peña ha administrado carteras de crédito de mercados emergentes en Morgan Stanley en Nueva York, y el cofundador de Aplazo, Alex Wieland, ha liderado operaciones y equipos de venta en startups latinoamericanas de rápido crecimiento, como Uber, Lime Scooters y Oyo. Juntos tenían el conjunto de habilidades y conexiones correctas para construir el Aplazo y resolver un problema importante en la región.
El problema del “acceso al crédito” afecta a la mayor parte de Latinoamérica y se está abordando de diferentes maneras en toda la región, dependiendo de las necesidades de diferentes clientes. En lugar de apresurarse a lanzar Aplazo en Latinoamérica, el equipo decidió por desarrollar más funciones y fortalecer el producto principal antes de ir al extranjero, pero el lanzamiento internacional está en sus planes de “medio plazo”, dijo Peña.
“Es un espacio enorme listo para la innovación, y el equipo está adoptando el enfoque correcto para construir una plataforma de pago de préstamos al consumidor muy centrada en el cliente y orientada por datos para ayudar a agregar un valor enorme a los comerciantes”, dijo Mariana Donangelo, socia de Kaszek.