Bloomberg — Tres meses después de que anunciaran su separación tras 27 años de matrimonio, Bill Gates y Melinda French Gates están oficialmente divorciados.
La disolución del matrimonio fue formalizada por un juez el lunes en el condado de King, Washington, según registros judiciales que detallan además que ninguna de las partes recibirá “manutención del cónyuge” ni cambiarán sus nombres. El juez ordenó a los Gates que dividieran sus bienes de acuerdo con los términos de un contrato de separación, el cual permanece bajo confidencialidad por términos del divorcio.
Las leyes de Washington estipulan un periodo de espera de 90 días entre la presentación del divorcio y su culminación. TMZ informó previamente de la conclusión oficial del matrimonio.
Desde que se anunciara la separación en mayo, más de US$3.000 millones en acciones de Cascade Investment, propiedad de Gates, se transfirieron a nombre de French Gates. Eso representa una fracción de su fortuna, que ascendía a US$146.000 millones al momento del anuncio, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg, aunque es posible que nunca se sepa cómo se reparten los activos privados de la ex pareja. La fortuna de Gates, de 65 años, vale actualmente más de US$150.000 millones, según el índice.
Si bien Washington es un estado que reconoce la propiedad conyugal (lo que significa que todo lo que se acumula durante el matrimonio se considera de ambos por igual), el contrato de separación puede reemplazar esos térmonos siempre que ambas partes estén de acuerdo y el tribunal lo considere justo. En la declaración del lunes, el juez calificó el plan de división de bienes como “justo y equitativo”.
Bajo un intenso reflector
En los meses que siguieron al anuncio del divorcio, la atención se centró en el futuro de la Fundación Bill y Melinda Gates. Warren Buffett, el único fideicomisario aparte de la pareja, abandonó el consejo en junio, mientras que la fundación anunció que sumaría a más miembros. Por su parte, French Gates, de 56 años, podría dejar su cargo dentro de dos años si ella y Gates no logran trabajar de forma conjunta.
La pareja también se comprometió a destinar US$15,000 millones más a la organización. Ese dinero se asignará a la dotación de la fundación, que ascendía a unos US$50.000 millones antes del anuncio del divorcio y ha entregado una cantidad similar a lo largo de las últimas dos décadas.
French Gates, que presentó la demanda de divorcio en mayo, firmó el documento el 30 de julio desde “Pivotal Ventures”, su empresa de inversión e incubación centrada en la igualdad de género con sede en Washington.