Santiago — Casi la totalidad de los dirigentes de un sindicato de la mina de cobre más grande del mundo, Escondida, rechazaron la última oferta de la empresa anglo-australiana BHP Billiton y aprobaron una paralización de actividades.
En una votación que se realizó entre el jueves y el sábado, un 99,5% de los 2.164 votantes apoyó una huelga y solo 11 trabajadores se inclinaron por aceptar la oferta de la empresa. Según un comunicado del Sindicato número 1, esperan que el resultado de la elección sea un “llamado de atención decisivo para que BHP inicie conversaciones sustantivas para alcanzar acuerdos satisfactorios, si es que quiere evitar un extenso conflicto, que podría ser el más costoso de la historia sindical del país”.
La compañía informó que después de ser informados sobre la decisión del gremio pedirán la mediación obligatoria de la Dirección del Trabajo de Chile. “Tal como indica la ley, una vez que la mediación sea confirmada, las partes tendrán cinco días hábiles para continuar con las conversaciones”, explicó.
La empresa controladora de la mina dijo que su interés está “puesto siempre en lograr acuerdos con sus trabajadores”, asegurando mantenerse “abiertos al diálogo y a aprovechar todas las instancias disponibles para ello”.
El gremio propone distribuir en partes iguales, entre todos los trabajadores, el 1% de los dividendos entregados a los inversionistas extranjeros. “No solo es legítima, sino que justa, ante el enorme compromiso mostrado por los trabajadores para que la Minera Escondida haya seguido funcionando a plena capacidad durante la pandemia”, dijeron dirigentes del sindicato.
Escondida produce el 24,5% del cobre de Chile y aporta un 6,8% al mundo. Un prolongado paro podría representar un fuerte retroceso de la actividad económica mensual del país austral.