Lima — El Perú celebra este 28 y 29 de julio su aniversario de independencia; y con él, 200 años de libertad que llegan en pleno cambio de mando presidencial. En medio de la polarización social, una pandemia que sigue afectando la vida de miles de peruanos y una economía en recuperación tras una grave recesión, Pedro Castillo Terrones asumió el cargo de Presidente de la República realizando una serie de promesas a la población, y asegurando que no traicionará a su electorado más fiel.
“No los defraudaremos. Yo no lo defraudaré”, dijo Castillo Terrones al inicio de su extenso discurso, en el que abordó una serie de materias más que claves para el país en la actualidad. Desde Bloomberg Línea Perú buscamos analizar con expertos los anuncios realizados por el presidente, así como la viabilidad (y firmeza) de sus propuestas. Esto fue lo que nos respondieron.
VER MÁS: Video: El apoyo del Congreso, entre los retos que tendrá que superar Pedro Castillo
MENSAJE SIMBÓLICO, AUNQUE CONTRADICTORIO
Arturo Maldonado, politólogo de la Universidad Católica del Perú (PUCP), considera que el mensaje del presidente Pedro Castillo Terrones fue uno que cumplió con las expectativas. “Se centró en los dos aspectos más importantes que los ciudadanos están más preocupados, la reactivación y la salud pública”, resalta.
Pero aunque Maldonado remarca que hubo simbolismo y sintonía con las principales preocupaciones sociales de la población peruana en el discurso del flamante presidente, sí apunta que existieron algunas contradicciones.
“La revisión de los contratos de estabilidad, por ejemplo, es una de las cuestiones que él mencionó como uno de los elementos con los que él está en contra de la Constitución de Fujimori (Constitución de 1993) y piensa que deberían ser revisados -aunque no fue del todo claro con eso-. Pero si estamos hablando de mantener las reglas de juego o de mantener a los inversionistas calmados, eso no está en esa dirección”, explica el politólogo.
“(...) ¿Es cierto que esos cambios (económicos) implican poner en riesgo los logros conseguidos con el esfuerzo de todos los peruanos durante las últimas décadas? No, no lo es”.
Pedro Castillo Terrones, presidente del Perú
En esta misma línea, el presidente Castillo indicó durante su mensaje que en su gestión presidencial no se va a “estatizar”, y sumó que se mantendrán en la cordura económica. No obstante ello, el mandatario anunció otros mensajes que podrían encender las alarmas en ciertas industrias, opina el experto.
“La industria de energía o minería son las principales, pues son donde están los contratos de estabilidad. Vamos a ver cómo se operativiza eso (la posible revisión de dichos contratos) para ver la relación que planteará con esos sectores”, argumenta Maldonado.
VER MÁS: Bonos peruanos en dólares caen tras mensaje a la nación de Pedro Castillo
ASAMBLEA CONSTITUYENTE: LA FORMA MÁS RESPONSABLE DE ABORDARLA
Aunque diversas personas pedían a Castillo Terrones no abordar los temas de una nueva Constitución y de una Asamblea Constituyente, principales propuestas del mandatario durante la campaña desde antes de la segunda vuelta electoral, Maldonado considera que era inevitable que se mencionaran dichos ámbitos, a raíz de los anuncios previos al mensaje en los que Castillo había prometido a su electorado que esta sería una de sus principales prioridades desde el 28 de julio que asumía el poder.
En lo que coincidieron diversos analistas, incluido Maldonado, fue en que el presidente realizó el anuncio de la manera más responsable posible, dejando atrás versiones que especulaban que buscaría un cambio constitucional a toda costa y sin considerar las reglas de juego vigentes.
“Presentaremos un proyecto de ley (al Congreso) para reformar la Constitución; que, tras ser analizado y debatido por el Parlamento, esperamos que pueda ser aprobado y luego sometido a ratificación en referéndum popular”, anunció Castillo Terrones durante su mensaje a la nación, tras explicar que su gobierno comprendía que esta era la vía adecuada para concretar un posible cambio de la Constitución peruana.
“Es cierto que lo más responsable es depender del Congreso para ver cómo avanza este proceso. El tema es que creo que él tiene claro que para eso no tiene los votos. Eso ha quedado demostrado en la votación de la mesa directiva y sobre todo en la votación para bloquear que postule la lista de Perú Libre con sus aliados al Congreso”, argumenta Maldonado.
“Esta vez un gobierno del pueblo ha llegado para gobernar con el pueblo y para el pueblo”.
Pedro Castillo Terrones, presidente del Perú
Sin embargo, Maldonado critica el mensaje que dejó entre líneas el presidente Castillo, respecto a que el poder constituyente “emana del pueblo”. “Nuevamente, es un tipo de contradicción con la responsabilidad que asegura que buscan tener en este proceso”, comenta.
VER MÁS: Levitsky tras elecciones en Perú: “Me preocupa la reacción autoritaria de la derecha peruana”
LA SALUD: UN EJE CLAVE EN PANDEMIA
Durante su mensaje este 28 de julio, Castillo Terrones remarcó como una de sus principales líneas políticas la lucha contra la pandemia del COVID-19, con importante énfasis en preservar la vida y la salud.
“La salud es un derecho fundamental que el Estado debe garantizar. La salud física y mental será primera prioridad en el gobierno”, dijo el mandatario.
Por otro lado, Castillo Terrones dijo que, con el propósito de impulsar una mayor protección social, su gobierno impulsará “la consolidación de un solo sistema de prevención en salud unificando Essalud, el Sistema Nacional de Salud del Ministerio de Salud, las Direcciones Regionales de Salud y los sistemas de salud de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional”.
“Todos en un solo gran sistema que preste el servicio a todos los habitantes del país”, añadió.
Janice Seinfeld, experta en salud y directora de Videnza Consultores, remarca que la unificación es una meta sumamente grande donde falta detallar el cómo concretarlo sin perjudicar en el camino a los ciudadanos usuarios del sistema. La experta piensa, en esa línea, que lo fundamental en el corto plazo es potenciar el fortalecimiento del primer nivel de atención, “y que la población tenga un establecimiento cercano al que pueda acudir y sepa que quiere acudir”.
VER MÁS: La última entrevista a Waldo Mendoza, exministro de Economía
“Eso implica que se formen redes, pero no es necesariamente un proceso administrativo tan ambicioso que puede resultar hasta engorroso, como unificarlo todo”, comenta Seinfeld.
Seinfeld señala que sería ideal, por ejemplo, que un ciudadano que vive en un pueblo rural y es asegurado por el SIS pueda atenderse sin problemas en un establecimiento de salud de la zona que sea manejado, por ejemplo, por Essalud. En tal escenario, la experta indica que los propios sistemas del Estado se tendrían que hacer cargo de los pagos correspondientes para que dicha persona acceda a la atención y no pierda tiempo de calidad trasladándose a otro lugar.
“Esa para mí sería la forma más valiosa de unificación. Es menos que la gran unificación, pero permite que tengan procesos alineados más que el hecho de que sean todos una sola entidad”, anota.
¿EDUCACIÓN SUPERIOR UNIVERSAL?
Uno de los aspectos abordados por Castillo Terrones durante el mensaje a la nación, al mencionar el eje de educación, fue que en su gobierno se buscará impulsar gradualmente “una política de ingreso libre a las universidades y a la educación superior”. “Este sistema funciona bien en otros países y consideramos que aquí pasará lo mismo”, argumentó el mandatario.
¿Sería así? Para Hugo Ñopo, investigador principal de Grade, la respuesta no es tan simple.
“Hay pros y contras. A favor podríamos decir que somos una sociedad que está viviendo más tiempo, por lo que tendríamos que estudiar más tiempo y no solamente en una primera formación. Los profesionales después de trabajar un tiempo tienen que volver a formarse y recapacitarse en la universidad”, considera el investigador.
El argumento en contra, añade Ñopo, tiene que ver con la meritocracia. “No necesitamos que todos vayan a la universidad, sino que los mejores vayan. También se necesita educación técnica y hay muchos otros países que hacen ese tipo de selección. Necesitamos algún tipo de selección para guiar mejor a las personas”, menciona.
VER MÁS: Guido Bellido Ugarte es el nuevo presidente del Consejo de Ministros del Perú
Por otro lado, Ñopo acota que implementar un sistema como el que propone Castillo Terrones sería “carísimo”. El investigador remarca, en esa línea, que lo que debe discutirse es la complejidad que implicaría una transición del sistema actual a uno de acceso gratuito y universal. “Va a ser un parto, muy difícil”.
AUSENCIAS IMPORTANTES EN EL EJE DE ECONOMÍA
En el ámbito económico Castillo Terrones realizó una serie de propuestas que van desde obras de gran envergadura hasta bonos para la población, y la extensión de programas de crédito para pymes afectadas por la crisis de la pandemia. En el ámbito de inversión pública y empleo, por ejemplo, dijo que se otorgarían 3.000 millones de soles para municipalidades y gobiernos regionales para la aceleración de inversiones; 1.000 millones de soles para arreglar trochas carrozables a los centros poblados; y 700 millones de soles para el programa Trabaja Perú, de pequeñas obras municipales intensivas en empleo.
VER MÁS: Congreso no recibió a Sagasti para dejar banda presidencial
No obstante, para Carlos Casas, decano de la facultad de Economía de la Universidad del Pacífico y exviceministro de Economía, faltó ver en el mensaje a la nación una agenda de mediano plazo que apostara por incrementar la productividad y reducir la informalidad, en lugar de continuar otorgando ayudas económicas que implicarían mayor gasto fiscal y que no serían tan efectivas en el largo plazo.
“Se mencionaba en el discurso que hubo un sesgo en el enfoque de los programas crediticios el año pasado, pero hay que recordar que las grandes empresas son las que generan más mano de obra, empleo de alta productividad y pueden pagar salarios más altos. Todos estos esfuerzos por ayudar a las unidades empresariales pequeñas, pescadores, cooperativas, pequeños agricultores y empresarios, creo que suenan bien en un primer momento, pero necesitamos empresas grandes que puedan generar sinergias y alta productividad. De lo contrario, condenamos al Perú a tener un océano de microempresas poco productivas” comenta el economista.
Otro aspecto destacado en el ámbito económico del mensaje de Castillo Terrones fue la nueva modalidad de licencia social, ahora llamada “rentabilidad social”.
Este nuevo criterio, explicó el presidente, significa “un nuevo pacto con los inversores privados, donde el Estado intervenga para reducir costos, facilitar procesos, mantener la seguridad jurídica, y a cambio la población local y el país reciban contribuciones que generen desarrollo y mayores oportunidades con un real cuidado del medio ambiente”.
Para Casas, esta modalidad puede ser problemática en la medida en en cómo se implemente.
“Las empresas mineras te pueden decir que gastan en inversión social, en apoyo a las comunidades, eso ya se está haciendo de alguna manera. Puede haber empresas que lo están haciendo mal, pero de que están gastando, están gastando. Si miras de cerca los datos de la minería, el 70% se queda en el país porque las mineras lo reinvierten, hacen que la contribución sea mayor. Que baje la conflictividad social no creo que sea cierto”, considera.