Bloomberg Línea — La mayoría de los alimentos en el supermercado debe permanecer fresca por más de un día antes de que podamos consumirla. Sin embargo, a medida que las demandas de los consumidores por alimentos limpios aumentan, al menos un desafío permanece: ¿Cuáles conservantes se pueden utilizar para mantener los alimentos frescos y preservar su naturaleza limpia?
Para los principiantes en alimentos limpios, el término “limpios” se refiere a alimentos que no incluyen ingredientes artificiales. El concepto normalmente está relacionado con alimentos frescos, como comida casera, pues en ese caso no se añade ningún conservante. Pero entre la fabricación, el transporte y el almacenamiento en los supermercados, es difícil hacer con que los alimentos lleguen a los consumidores antes de su fecha de vencimiento.
Los inversionistas apuestan que Leanardo Álvarez, ingeniero en biotecnología de Chile, pueda solucionar este problema. Alvarez es el fundador y director ejecutivo de Protera, que hoy ha anunciado una ronda de financiación de Serie A de US$ 10 millones, elevado su financiación total hasta la fecha a US$ 12,4 millones. La empresa fue fundada en 2015 en Santiago, Chile, y Protera todavía no está disponible en el mercado.
Actualmente con sedes en Chile y Francia, la empresa utiliza IA para diseñar y desarrollar nuevas proteínas de origen vegetal para reemplazar los ingredientes químicos perjudiciales de los alimentos, como el aceite de palma y las grasas trans, y preservar el plazo de validez de los alimentos sin comprometer su sabor o textura. La empresa ha desarrollado una proteína que promete mantener los alimentos frescos durante 30 días, mientras que otros conservantes limpios ofrecen entre siete y 15 días de frescor. Sus contrapartes sintéticas ofrecen solo aproximadamente 15 días de frescor.
“Hemos percibido que las grandes empresas de alimentos buscaban alternativas a los aditivos alimentarios, más específicamente los conservantes. El desafío es que los consumidores quieren rótulos que incluyan productos limpios, pero las alternativas ofrecidas no proporcionaban un largo plazo de validez”, dijo Alvarez a Bloomberg Línea. “Protera es una proteína, por lo tanto se puede digerirla sin los efectos negativos sobre la salud humana”, agregó.
En solo pocos años, el mercado de proteínas alternativas se ha convertido de nicho en mainstream, a medida que más y más personas se vuelven conscientes de sostenibilidad y de los problemas de salud típicamente relacionados con el consumo de productos animales. NotCo, de Chile, la startup de alimentos a base de plantas más famosa de América Latina, lidera el movimiento.
Protera viene en siguiente. Para probar su primera proteína, la empresa firmó una alianza y tuvo resultados positivos con Bimbo Group, una gran panadería multinacional de México que actúa en 33 países. “La próxima etapa es establecer como vamos a expandir”, dijo Alvarez.
Los franceses pueden ser la respuesta. Como Protera es un agente de fermentación, Alvarez espera que los europeos, expertos en fermentación de vinos y quesos, ayuden a encontrar las piezas del rompecabezas que es la expansión.
Alvarez espera que, entre la producción a escala y la certificación con el sello GRAS (Generally Recognized As Safe o “Reconocido Generalmente como Seguro”, en español) del FDA (American Food and Drug Administration, agencia de los EE. UU. que regula a alimentos y medicamentos), el producto se pondrá a disposición del mercado en algunos años.
Pero así como cualquier nuevo producto, la reacción de los consumidores es la verdadera prueba. Aunque Protera planea ser un negocio B2B, el cliente final leerá los rótulos. Hoy los consumidores son educados y cuando leen la lista de ingredientes, específicamente de alimentos limpios, generalmente buscan ingredientes cuyos nombres puedan pronunciar. No es exactamente la prueba más sofisticada, pero es una regla general que el consumidor promedio puede seguir.
Sin embargo, la pregunta permanece: ¿Protera funcionará?
Además de la propia proteína, Alvarez y su equipo desarrollaran a madi(™), plataforma de IA diseñada para comprender las proteínas en un nivel molecular.
“Ella puede comprender el tipo de estructura de la proteína y la composición química necesaria para realizar una función específica”, afirmó Álvarez.
Por ejemplo, si Álvarez busca a una proteína con propiedades antifúngicas, él puede preguntar a la plataforma: “¿Cómo será esa proteína?”. La plataforma fue entrenada para contestar con la forma y la composición correctas.
“Entonces, buscamos a esas proteínas en la naturaleza. Cuando la encontramos, la recreamos”, dijo Alvarez.
Esa ronda de financiación fue conducida por Sofinnova Partners, la más importante empresa de capital de riesgo del sector de ciencias de la vida de Europa. Bimbo Group, de México, y la aceleradora de startups de tecnologías de alimentos y agronomía de ICL Group, ICL Planet, también estuvieron en la ronda.