Pirámide “estrato 6″ de Felipe Rocha será intervenida por Supersociedades

Aunque Rocha, hijo del dueño de la ganadería Achury Viejo, presentó un Plan de Desmonte Voluntario que la Súper no aprobó. Se estima que inversionistas le entregaron unos $40.000 millones

Una ganadería a la cabeza de las cifras de producción de carne de vacuno en EE.UU.
23 de agosto, 2023 | 07:29 AM

Bogotá — La Superintendencia de Sociedades le dijo no al Plan de Desmonte Voluntario que presentó Felipe Rocha Medina en mayo de este año y ahora intervendrá el negocio para internar recuperar los recursos que le confiaron un grupo de inversionistas.

El pasado 15 de mayo de 2023 Rocha Medina manifestó a la Superintendencia de Sociedades su deseo de presentar un Plan de Desmonte Voluntario (PDV), para lo cual, el 19 de mayo del 2023 se le indicó que la persona facultada para presentarlo debía ser captador o recaudador no autorizado de recursos del público.

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La norma contempla que dicho plan requiere la aprobación del 75% de los afectados, la publicidad de la negociación y el otorgamiento de los mismos derechos a todos los beneficiarios.

Sin embargo, la entidad realizó varios requerimientos Rocha Medina para que presentara el plan propuesto con el lleno de los requisitos legales, pero este solicitó un plazo adicional para remitir nuevamente a los beneficiarios el nuevo texto y así obtener el 75% de aprobación de los votos.

Luego de la revisión y valoración de los documentos allegados y solicitudes presentadas, SuperSociedades decidió no autorizar dicho plan de desmonte voluntario por no cumplir con los requisitos legales.

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Adicionalmente, mediante Resolución 2023-01- 664975 de 18 de agosto de 2023, ordenó a Felipe Rocha Medina y a la sociedad Agropecuaria Achury Viejo y Cía. S. en C. la suspensión inmediata de las actividades de captación no autorizada de dineros del público.

En la referida norma, se ordenó que, a través de la dirección de intervención judicial de la entidad, se adopten las demás medidas dispuestas en el artículo 7 del Decreto Ley 4334 de 2008; como puede ser la intervención en toma de posesión de los bienes, haberes y negocios para devolver las sumas de dinero a los afectados o cualquier otra medida que se estime pertinente con dicho fin.

Al respecto, el Superintendente de Sociedades, Billy Escobar Pérez, señaló que “le recordamos a la ciudadanía tener precaución a la hora de invertir sus recursos, a consultar la realidad del negocio y si las personas que los ofrecen cuentan con los permisos para ejercer esa actividad financiera, así como en los eventos o supuestas inversiones en los que se adviertan ofrecimientos que brinden altos rendimientos o ganancias sin explicación financiera razonable”.

El pasado 17 de marzo la agencia Primera Página destapó el escándalo y explicó que el problema radicó en que Rocha ya no estaba comprando ganado para invertir, sino que estaba usando el dinero de los nuevos inversionistas para pagarle la rentabilidad a los antiguos.

Al comienzo fue un negocio de no más de 10 amigos de Rocha Medina, consistente en poner una plata para que él la utilizara en un lote de cabezas de ganado para engorde. Las ganancias que dejara la venta del ganado ya engordado, se repartían entre Rocha Medina y el inversionista (50%-50%).

Rocha Medina es un gran conocedor de ganado. Es hijo de Felipe Rocha Marulanda, el dueño de la reconocida ganadería Achury Viejo, que fue fundada en 1933 por su padre Benjamín Rocha Gómez, de familia procedente de las Islas Canarias, de España. Achury Viejo fue la ganadería de buena parte de las corridas de toros de la Plaza de toros La Santamaría, ubicada en el centro de Bogotá.

Era un negocio bastante cerrado, al que la autoridad no tenía acceso. Era un tema de amigos. Pero el número de inversionistas amigos empezó a crecer a través de amigos referenciados por otros amigos, así, pasó de 10 a 20. Luego a 40. Más tarde a 60 y cuando estalló el escándalo se hablaba de unos 80.

El problema estuvo en que Felipe Rocha ya no estaba comprando ganado para invertir, sino que estaba usando el dinero de los nuevos inversionistas para pagarle la rentabilidad a los antiguos.