Bloomberg — La industria mundial del litio necesita una inversión de hasta US$42.000 millones para fines de la década a fin de satisfacer la demanda de este material crucial para la fabricación de baterías, con los intentos de construir cadenas de suministro fuera de China sujetas a costos mucho más altos, según un proveedor de datos e inteligencia de mercado.
El sector necesitará US$7.000 millones de inversión cada año desde ahora hasta 2028, según un informe de Benchmark Mineral Intelligence. Eso le ayudaría a satisfacer una demanda prevista de 2,4 millones de toneladas anuales para 2030, lo que supone cuatro veces más que las 600.000 toneladas que se calcula que se producirán en 2022.
La previsión se produce en un momento en que Europa y Norteamérica buscan reducir su dependencia de las importaciones chinas y desarrollar su propia producción de litio. Esta estrategia podría requerir alrededor del doble de capital que depender de la obtención del producto refinado de la potencia asiática, dijo Benchmark.
China ha disfrutado de un dominio sobre la cadena de suministro de litio, reforzado por la agrupación económica, un alto nivel de experiencia y menores costos laborales y energéticos.
“Si se quiere litio con el menor impacto ESG posible, la solución puede costar más fuera de China”, dijo el analista Cameron Perks en el informe.
En Estados Unidos, el gobierno de Biden ha impulsado la aceleración de la producción de metales clave para baterías, con más de US$3.000 millones en subvenciones para ayudar a procesar elementos como el litio. Mientras tanto, Canadá también ha destinado hasta $3.800 millones de dólares canadienses (US$.900 millones) en el presupuesto de este año para construir una cadena de suministro de metales críticos a nivel nacional.
El litio, que es fundamental para la transición hacia las energías limpias, se ha disparado más de un 400% en China durante el último año, ya que el suministro lucha por seguir el ritmo del auge de los vehículos eléctricos. Elon Musk, CEO de Tesla Inc. (TSLA), hizo un llamado público para que se invierta más en la extracción de litio, y ha dicho que el gigante automovilístico podría considerar la posibilidad de extraerlo o refinarlo directamente después de que los precios subieran a “niveles demenciales”.
La escasez de materias primas para producir baterías está limitando la producción de vehículos eléctricos, lo que significa que es posible que sus fabricantes deban involucrarse en la minería si quieren fabricar autos a escala, dijo en el informe el CEO de Benchmark, Simon Moores. Si bien los principales productores de litio tienen grandes inversiones planeadas, esas por sí solas no serán suficientes y se necesitan nuevas minas, agrega la nota.
Los fabricantes de automóviles podrían intervenir y “tienen más de una razón para hacerlo”, según Perks. “A diferencia de los inversionistas, no buscan sólo un retorno de las ganancias generadas por el litio. Buscan asegurarse el suministro para sus baterías”.
Este artículo fue traducido por Estefanía Salinas Concha.