Bloomberg — Las bolsas asiáticas abrieron el lunes de forma estable, a la espera de los datos que subrayan la ralentización económica de China, en medio de la especulación de que las autoridades tomarán medidas para impulsar el crecimiento.
Los futuros subieron en Japón y Australia y se mantuvieron estables en Hong Kong. El dólar se comportó de forma mixta en las primeras operaciones asiáticas. Los mercados estadounidenses están cerrados el lunes por un día festivo.
La caída del sector inmobiliario y la escasez de energía pueden haber contribuido a la expansión más débil de China en más de un año durante el último trimestre. El país también está lidiando con cierres parciales para frenar la propagación del Covid-19. Los operadores están a la espera de ver si el Banco Popular de China baja un tipo de interés clave.
Las perspectivas de China, el endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal para luchar contra la alta inflación, la cepa del virus ómicron y las ganancias de las empresas están marcando el sentimiento. El inversor multimillonario Bill Ackman dijo que la Reserva Federal debería subir su tipo de interés clave en 50 puntos básicos más de lo esperado en marzo para “restaurar su credibilidad”.
El retroceso de las acciones estadounidenses, liderado en parte por el sector tecnológico, ha lastrado la renta variable mundial este año, mientras que el rendimiento del Tesoro a 10 años ha vuelto a niveles anteriores a la pandemia que sacudió los mercados mundiales en 2020.
La resistencia de los beneficios empresariales es un área clave de atención tras el inicio de la temporada de resultados, según Julian Emanuel, estratega jefe de renta variable y cuantitativa de Evercore ISI.
“Dada la situación de inflación récord y la rigidez histórica del mercado laboral, la atención de los inversores se centra en los márgenes, es decir, en demostrar el poder de fijación de precios y trasladar el aumento de los costes al cliente”, escribió Emanuel en una nota.
Por otra parte, los operadores están evaluando si el petróleo, que registró una cuarta subida consecutiva la semana pasada, seguirá subiendo. El bitcoin cotizaba en torno a los US43.000 dólares.
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